martes, 14 de junio de 2011
martes, 31 de mayo de 2011
martes, 24 de mayo de 2011
miércoles, 11 de mayo de 2011
Coche(biscuter)
No sería posible describir los años cincuenta en España sin el Biscuter dada su popularidad ya que significó el acceso del españolito a un vehículo de cuatro ruedas. Con un coste de 25.000,- Ptas "sólo" representaban el sueldo de 3 años cuando para adquirir un caro vehículo importado se necesitaban casi las 100.000,- Ptas de la época (un sueldo aproximado de unos 10 años).
El principio de la historia: Pese a lo que significó en la España de la posguerra y a su arraigo popular (que dio lugar a chistes, chascarrillos como "es más fea que un Biscuter", etc.) fue obra de un ingeniero francés: Gabriel Voisin pionero de la aviación (construyó el primer aeroplano que voló sobre Europa) y fabricante de vehículos en Francia, que en 1920 diseñó un microcoche llamado "Sulky" de motor dos tiempos trasero que finalmente no se produjo. Una vez terminada la segunda guerra mundial Voisin empezó a trabajar otra vez en la idea del cochecillo de dos plazas y durante los años 1947/48 diseñó un nuevo vehículo de carrocería monocasco de aluminio fabricada por Potez y motor delantero de dos tiempos 125 cc marca Gnome & Rhone (quien debía de producir el vehículo) que fue presentado en el Salón de París de 1949 bajo el nombre de Biscooter. El pequeño Voisin fue un gran éxito y se llegaron a admitir casi 1.500 pedidos en firme, aunque un estudió de mercado posterior no aconsejo su producción, lo que unido a las desavenencias de Voisin con Gnome Rhone parecía indicar que el proyecto quedaría en el más absoluto de los olvidos, pero un grupo de empresarios españoles supo ver las posibilidades que el vehículo tendría en una España sedienta de motorizarse y se adquirió la patente a la empresa francesa "Compagnie Aeromecanique Francaise" para comenzar su producción en España.
El principio de la historia: Pese a lo que significó en la España de la posguerra y a su arraigo popular (que dio lugar a chistes, chascarrillos como "es más fea que un Biscuter", etc.) fue obra de un ingeniero francés: Gabriel Voisin pionero de la aviación (construyó el primer aeroplano que voló sobre Europa) y fabricante de vehículos en Francia, que en 1920 diseñó un microcoche llamado "Sulky" de motor dos tiempos trasero que finalmente no se produjo. Una vez terminada la segunda guerra mundial Voisin empezó a trabajar otra vez en la idea del cochecillo de dos plazas y durante los años 1947/48 diseñó un nuevo vehículo de carrocería monocasco de aluminio fabricada por Potez y motor delantero de dos tiempos 125 cc marca Gnome & Rhone (quien debía de producir el vehículo) que fue presentado en el Salón de París de 1949 bajo el nombre de Biscooter. El pequeño Voisin fue un gran éxito y se llegaron a admitir casi 1.500 pedidos en firme, aunque un estudió de mercado posterior no aconsejo su producción, lo que unido a las desavenencias de Voisin con Gnome Rhone parecía indicar que el proyecto quedaría en el más absoluto de los olvidos, pero un grupo de empresarios españoles supo ver las posibilidades que el vehículo tendría en una España sedienta de motorizarse y se adquirió la patente a la empresa francesa "Compagnie Aeromecanique Francaise" para comenzar su producción en España.
Coche de gasogeno
Este coche era el que se utilizaba en españa en los antiguos años de crisis
La difícil situación en la que se encontraba nuestro país al final de la Guerra Civil, con una gran escasez de combustible debida en gran medida al inmediato estallido de la Segunda Guerra Mundial, hizo que durante toda la década de los años cuarenta se modificaran infinidad de vehículos para circular con este sistema: desde autocares, hasta automóviles, camiones e incluso tractores y alguna motocicleta. En los camiones y autocares las calderas y depósitos se acoplaban mejor, por su mayor espacio disponible, aunque en algunos automóviles todo el sistema se instalaba en un remolque. Lo asequible de la tecnología hizo que cientos de talleres se dedicaran a fabricar este tipo de artilugios, un ámbito en el que participaron desde pequeños talleres locales hasta grandes marcas como las filiales españolas de Ford, Renault o Michelín.
La querra de ifni
Apareció el marroquí con un borrico, seguido por otras dos personas. Cuando los militares españoles les dieron el alto, empezaron a disparar. Disparaban los tres marroquíes, pero también disparaban otros desde las casas próximas y muchos más que debían llevar horas emboscados en los palmerales de las riberas. El cauce seco, que hasta ese momento había estado sumido en una oscuridad apacible, se iluminó como el infierno. Los españoles respondieron con sus armas, a discreción. Uno de ellos, que hacía guardia en los polvorines, cayó muerto. Quince minutos más tarde, los disparos cesaron tan súbitamente como habían empezado. Entonces cuatro soldados se aventuraron por la ribera derecha, con la intención de sorprender a los rebeldes por la espalda. Avanzaban entre tinieblas. Un subfusil crepitó y la ráfaga abatió a los tres primeros. Aun herido, uno de ellos pudo lanzar una granada contra el lugar desde el que les habían disparado. El que había quedado ileso aprovechó la explosión y se lanzó sobre el rebelde emboscado. La lucha era cuerpo a cuerpo. Todo terminó cuando el soldado herido que había lanzado la granada logró recuperar su fusil y, de un tiro en la cara, acabó con el marroquis.
Franco ordenó precaución para no enfadar a Marruecos.El verano de 1957, la tensión era máxima. Muchos militares nativos se pasaban al enemigos
La misera de la tropa era tal que hubo que permitir que los soldados desfilaran en alpargatas
Sitiados en la loma, los españoles aguantaron seis días bebiendo su orín y chupando plantas
Así comenzó la última guerra librada por España en Marruecos. Sucedió en las afueras de Sidi Ifni a las seis menos cuarto de la madrugada del 23 de noviembre de 1957. Por orden de Franco, la opinión pública nunca fue informada de las dimensiones del conflicto, que se extendió al Sáhara y provocó 198 muertos, 574 heridos y 80 desaparecidos entre los soldados españoles que protegían las colonias y un número indeterminado de bajas entre los partisanos marroquíes del Ejército de Liberación que trataban de desalojarlos.
Ifni era entonces un destino codiciado por los militares profesionales. La independencia de Marruecos, proclamada poco más de un año antes, había dejado huérfanos a miles de africanistas. Como el propio dictador, ellos habían hallado en el país vecino una vía rápida para ascender, sueldos que duplicaban a los de sus compañeros de la Península y un prestigio social impensable en la metrópoli, donde sólo podían aspirar al pluriempleo. Finiquitado el Protectorado del Norte y expulsados del Rif y del Yebala, sólo les quedaban Ifni y el Sáhara para continuar disfrutando de una sociedad a su medida. Las dos colonias olvidadas se habían convertido en su último refugio.
Franco ordenó precaución para no enfadar a Marruecos.El verano de 1957, la tensión era máxima. Muchos militares nativos se pasaban al enemigos
La misera de la tropa era tal que hubo que permitir que los soldados desfilaran en alpargatas
Sitiados en la loma, los españoles aguantaron seis días bebiendo su orín y chupando plantas
Así comenzó la última guerra librada por España en Marruecos. Sucedió en las afueras de Sidi Ifni a las seis menos cuarto de la madrugada del 23 de noviembre de 1957. Por orden de Franco, la opinión pública nunca fue informada de las dimensiones del conflicto, que se extendió al Sáhara y provocó 198 muertos, 574 heridos y 80 desaparecidos entre los soldados españoles que protegían las colonias y un número indeterminado de bajas entre los partisanos marroquíes del Ejército de Liberación que trataban de desalojarlos.
Ifni era entonces un destino codiciado por los militares profesionales. La independencia de Marruecos, proclamada poco más de un año antes, había dejado huérfanos a miles de africanistas. Como el propio dictador, ellos habían hallado en el país vecino una vía rápida para ascender, sueldos que duplicaban a los de sus compañeros de la Península y un prestigio social impensable en la metrópoli, donde sólo podían aspirar al pluriempleo. Finiquitado el Protectorado del Norte y expulsados del Rif y del Yebala, sólo les quedaban Ifni y el Sáhara para continuar disfrutando de una sociedad a su medida. Las dos colonias olvidadas se habían convertido en su último refugio.
martes, 12 de abril de 2011
viernes, 8 de abril de 2011
coincidencias entre la vida de kennedy y la de linconln
La vida de cada uno de nos, con todos sus tiempos, es siempre la misma, repitiéndose de existencia en existencia, a través de los innumerables siglos.
- Como primera "coincidencia" señalaremos el hecho, ya evidente, de que ambos, Lincoln y Kennedy, fueron presidentes de los E.U.A.
- Tanto Lincoln como Kennedy murieron asesinados: el presidente Lincoln fue asesinado en un viernes, y en un viernes fue también asesinado el presidente Kennedy.
- El presidente Lincoln fue herido de bala por la espalda mientras estaba sentado en un palco del teatro. El presidente Kennedy fue herido de bala por la espalda mientras estaba sentado en un automóvil.
- Todos hemos leído que el presidente Lincoln, junto a su mujer y rodeado de mucha gente, disfrutaba de una representación teatral en el momento de ser asesinado. El presidente Kennedy estaba visitando Dallas, Texas. El también se encontraba acompañado de su esposa y entre la multitud, que le aclamaba mientras pasaba, en el momento de su muerte.
- Un hombre llamado Jhonson sucedió al presidente Lincoln. Jhonson fue presidente después del presidente Lincoln. En Texas, el presidente Kennedy fue asesinado y el vicepresidente Jhonson juró como presidente de los E.U.A., a bordo de un avión que trasladaba de vuelta a la capital el cuerpo del presidente muerto y el del nuevo presidente vivo. Jhonson, pues, es el nombre de ambos sucesores.
- El Jhonson que sucedió al presidente Lincoln era demócrata del sur de los E.U.A. , y Lindon Jhonson, que sucedió al presidente Kennedy, también era demócrata del sur, de Texas.
- Pero sigamos en esta lista de "coincidencias" con los Jhonson. Ambos habían sido también miembros del Senado antes de ser presidentes.
- Lincoln fue elegido para desempeñar su cargo de presidente el año 1860. Eso puede también ser fácilmente comprobado en los libros de historia. Así Lincoln fue presidente en 1860, y he aquí otra "coincidencia": Kennedy fue presidente en 1960, cien años después.
- El sucesor de Lincoln fue Andrew Jhonson. Andrew Jhonson nació en 1808, y el Jhonson que sucedió al presidente Kennedy nació en 1908.
- Lincoln fue asesinado por un individuo bastante extraño, un total resentido si hemos de creer las noticias que ahora son historia; ese asesino fue John Wilkes Booth, que nació en 1839. Lee Harvey Oswald que, según se afirmó, asesinó al presidente Kennedy, parece haber sido también un tipo de persona totalmente insatisfecha, un resentido, que frecuentemente se hallaba en dificultades. Nació en 1939.
- Booth fue asesinado antes de que pudiera comparecer ante un tribunal, lo mimo que Oswald, asesinado también mientras era conducido por la policía y antes de que pudiera comparecer ante el tribunal.
- Estas coincidencias que hemos visto se extienden no sólo a los presidentes y a sus asesinos, sino también a sus esposas, porque la señora de Lincoln, esposa del presidente Lincoln, perdió un hijo durante su residencia en la Casa Blanca; y la señora de Kennedy, esposa del presidente Kennedy, perdió un hijo también durante su residencia en la Casa Blanca.
- Lincoln tenía un secretario, y ese secretario se llamaba Kennedy. El secretario Kennedy advirtió vivamente al presidente Lincoln que no fuera al teatro donde fue asesinado. El presidente Kennedy también tenía un secretario, y este se llamaba Lincoln. El secretario Lincoln advirtió al presidente Kennedy que no fuera a Dallas.
La leyenda negra de kennedy y su familia
La familia Kennedy, además tiene un récord de fatalidades que difícilmente sea superable por otra familia en el mundo. Por ese motivo se cree que pende sobre los miembros del clan Kennedy una maldición...
¿Cómo comenzó todo?, ¿cuándo ocurrió la primera tragedia que fue el eslabón inicial de una serie de muertes antinaturales tan notables que se empezó a hablar de una maldición?.
Antes que nada debemos aclarar que los Kennedy son como una especie de realeza postiza en los Estados Unidos. País sin gente de sangre azul, el pueblo americano reconoce en la familia Kennedy una dinastía de privilegio. Su fortuna, es considerable, el talento de sus integrantes para la política fue decisivo, el sex appeal de sus miembros masculinos siempre fue una certeza. Sin duda se trata de una familia poco común, pero condenada por un ensañamiento con la muerte que de tanto visitarlos se diría es casi como una tía lejana.
¿Cómo comenzó todo?, ¿cuándo ocurrió la primera tragedia que fue el eslabón inicial de una serie de muertes antinaturales tan notables que se empezó a hablar de una maldición?.
Antes que nada debemos aclarar que los Kennedy son como una especie de realeza postiza en los Estados Unidos. País sin gente de sangre azul, el pueblo americano reconoce en la familia Kennedy una dinastía de privilegio. Su fortuna, es considerable, el talento de sus integrantes para la política fue decisivo, el sex appeal de sus miembros masculinos siempre fue una certeza. Sin duda se trata de una familia poco común, pero condenada por un ensañamiento con la muerte que de tanto visitarlos se diría es casi como una tía lejana.
martes, 5 de abril de 2011
La Crisis de los Misiles en Cuba: octubre del 62.
La mayor confrontación entre los Estados Unidos y la Unión Soviética no se dio en Europa, sino en el Caribe. Tuvo lugar durante la llamada "crisis de los misiles" en Cuba, en octubre de 1962.
En abril de 1961 Fidel Castro proclamó oficialmente el carácter socialista de su gobierno. Con ello daba un giro radical al programa original de la revolución cubana. Ahora se trataba de establecer en Cuba un socialismo de corte soviético, por lo que el primer ministro de la URSS, Nikita Khrushchev no tuvo reparos en fortalecer el subsidio del nuevo régimen de La Habana. La URSS no solo garantizó a Fidel Castro grandiosos recursos económicos, sino también asesores militares y armas de todo tipo, incluidos entre ella los misiles balísticos nucleares de medio e intermedio alcance. Así se inició la construcción en Cuba de rampas para el lanzamiento de cohetes capaces de llegar en minutos a la zona sur oriental de los Estados Unidos. El objetivo fundamental desde el punto de vista soviético era el de modificar el equilibrio de armas atómicas desplazadas por el mundo, hasta entonces desfavorable a la URSS.
Estados Unidos se les encargó la tarea de interceptar y revisar todos los barcos que se dirigían a Cuba. El fin era el de comprobar si conducían armas atómicas. Esta medida de Estados Unidos contó con el respaldo de la Organización de Estados Americanos.
El final de la crisis constituyó un paso de avance hacia el fin de la guerra fría. Sin embargo para el gobierno de Cuba resulto un hecho frustrante, pues no tuvo en cuenta sus condiciones para la retirada de los cohetes ni se incluyó a Castro como firmante del pacto. Por un tiempo las relaciones de la Habana y Moscú se agriaron a causa de esta exclusión. Fidel Castro no sólo le dio un frío recibimiento a Anastas Mikoyan, encargado de relaciones exteriores de la URSS, cuando este visitó Cuba poco después de la crisis, sino que respondió a la política soviética de distensión con la incentivación de grupos armados en toda América Latina, y en diversos países de Africa. La Habana condenó la política reformista de los Partidos Comunistas mucho de los cuales se fragmentaron en grupos de "prosoviéticos" y "procastristas". Estas divergencias se extendieron hasta principios de los de los setenta. Cuba inició realmente la mejoría sus relaciones con la URSS a partir de dos hechos, la muerte de Guevara en Bolivia (1967) y la defensa pública hecha por Castro de la entrada de los tanques soviéticos en Praga (1968). Dentro del exilio cubano en EUA, el pacto Kennedy-Krushchev, tampoco resultó muy bien recibido, pues aquel acuerdo se interpretó como la entrega oficial de Cuba al imperialismo soviético
Guerra Fría,1947-1991
El término "guerra fría" fue por primera vez utilizado por el escritor español Don Juan Manuel en el siglo XIV. En su acepción moderna fue acuñado por Bernard Baruch, consejero del presidente Roosevelt, quién utilizó el término en un debate en 1947 y fue popularizado por el editorialista Walter Lippmann.
Este concepto designa esencialmente la larga y abierta rivalidad que enfrentó a EE.UU. y la Unión Soviética y sus respectivos aliados tras la segunda guerra mundial. Este conflicto fue la clave de las relaciones internacionales mundiales durante casi medio siglo y se libró en los frentes político, económica y propagandístico, pero solo de forma muy limitada en el frente militar.
El motivo de que la "guerra fría" no se convirtiera en "caliente" fue la aparición del arma nuclear. Antes de la bomba, la guerra era, como afirmó Clausewitz, la continuación de la política por otros medios, tras Hiroshima, la confrontación directa entre las potencias llevaba a la catástrofe general.
Los crecientes arsenales nucleares que las superpotencias fueron acumulando impidieron una guerra directa que nadie hubiera ganado, sin embargo, EE.UU. y la URSS y sus aliados utilizaron la intimidación, la propaganda, la subversión, la guerra local mediante aliados interpuestos...
Iniciada de forma clara y definitiva en 1947, tras un rápido proceso de deterioro en las relaciones de los antiguos aliados, la guerra fría alcanzó su cenit en 1948–53. Tras diversos períodos de distensión y enfrentamiento, la llegada de Gorbachov al poder en la URSS desencadenó un proceso que culminará con la desintegración de la URSS en 1991. La guerra fría había concluido.
El matrimonio Rosenberg
Una de las historias más conocida de injusticia flagrante y criminal por parte de un estado es, sin duda, la de los Rosenberg.
Ethel Greenglass Rosenberg (1918-1953) y Julius Rosenberg (1915-†1953) fueron un matrimonio judío de los Estados Unidos de América ejecutados en la silla eléctrica acusados de espionaje.
Julius Rosenberg nació en Nueva York, el 12 de mayo de 1918, y era ingeniero eléctrico, mientras su esposa Ethel, también nacida en Nueva York el 28 de sptiembre de 1915, era aspirante a actriz y cantante. Ambos formaron parte de la Young Communist League, las juventudes del Partido Comunista de los Estados Unidos.
Ethel Greenglass Rosenberg (1918-1953) y Julius Rosenberg (1915-†1953) fueron un matrimonio judío de los Estados Unidos de América ejecutados en la silla eléctrica acusados de espionaje.
Julius Rosenberg nació en Nueva York, el 12 de mayo de 1918, y era ingeniero eléctrico, mientras su esposa Ethel, también nacida en Nueva York el 28 de sptiembre de 1915, era aspirante a actriz y cantante. Ambos formaron parte de la Young Communist League, las juventudes del Partido Comunista de los Estados Unidos.
El origen del juicio y ejecución de este matrimonio hay que buscarlo en las filtraciones de secretos nucleares acontecidas tanto en el centro de investigación nuclear de Los Álamos como en la Universidad de Berkeley, donde existía un importante sector simpatizante de la izquierda, especialmente entre los científicos. Un antiguo maquinista del centro super-secreto de Los Álamos, el sargento David Greenglass, hermano de Ethel, confesó haber pasado secretos a los rusos y acusó así mismo a su hermana y al esposo de ésta, confesión que condujo directamente hacia el matrimonio Rosenberg, que fue detenido, acusado y juzgado por espionaje.
Aún hoy, se considera que el juicio a que ambos se vieron sometidos distó mucho de haber sido justo, y ciertas o no las acusaciones de espionaje, ambos fueron ejecutados en virtud del Acta de Espionaje de 1917, que dictaba pena de muerte para este tipo de delitos en tiempo de guerra, si bien en el momento de haberse cometido el supuesto espionaje, los Estados Unidos no se encontraban en guerra con la Unión Soviética. Al comparar este caso con otros de la misma índole, resueltos con penas mucho más leves a pesar de existir pruebas más concluyentes (como el caso de Klaus Fuchs, condenado a sólo 14 años de prisión tras haber espiado a los Estados Unidos en favor de la Unión Soviética durante muchos años), se denota un agravio comparativo, espoleado tal vez por el ambiente anti-comunista y el miedo imperante en la sociedad americana a un inminente enfrentamiento con la Unión Soviética que había degenerado en el «Mccarthismo».
Ambos fueron finalmente ejecutados en la silla eléctrica el 19 de junio de 1953, y las crónicas de la época cuentan que, aunque Julius murió a la primera descarga, su esposa Ethel, a pesar de ser una mujer más pequeña y supuestamente frágil, resistió hasta tres descargas eléctricas antes de fallecer, hecho del que se responsabilizó al diseño de la silla, construida para una persona de mayor envergadura y cuyos electrodos al parecer no se ajustaban «adecuadamente» al cuerpo de la mujer.
El matrimonio Rosenberg, juzgados por ser judíos y comunistas, dieron un ejemplo al mundo y a la historia de dignidad, principios y entereza, y se negaron a asumir la culpa que no habían cometido acabando sus días en la inhumana silla eléctrica. Amantes hasta el final, Ethel, una mujer fuerte y valiente, dedicó un poema a sus hijos, es decir, a todos sus hijos, a quienes creemos en la verdad, en la dignidad del hombre, en que algún día veremos un mañana en el cual el paraíso esté en esta tierra y sea para todos.
jueves, 24 de marzo de 2011
martes, 15 de marzo de 2011
viernes, 4 de marzo de 2011
Casas viejas 1933
EL TRATAMIENTO INFORMATIVO DE LOS SUCESOS
Al analizar lo publicado en el diario de Cádiz sobre los Sucesos de Casas Viejas del 11 de Enero al 31 del mismo mes del año 1933, se comprueba la evolución informativa y los cambios sufridos por la opinión pública con respecto a estos Sucesos. Las informaciones de los días 11,12 y 13 son incompletas, inexactas e incorrectas, pero se advierte un tono crítico hacia "los campesinos agresores" y un tono comprensivo con la actuación de la Guardia Civil y la de asalto. "La situacion queda dominada en Casas Viejas, para lograrlo, la Fuerza Pública hubo de incendiar con bombas de mano la casa en que se hicieron fuertes los anarquistas", el día 13 se culpa al anarquismo de lo acaecido. A partir del 16 de Enero las informaciones del Diario de Cádiz van cambiando progresivamente de tono, se menciona la agudización del paro obrero y aparecen informaciones sobre la situación económica y social de la zona. A partir del 25 de Enero aparecen suscripciones y campañas de solidaridad con las víctimas. En el diario de Cádiz del dia 28 aparecen las primeras críticas a la Guardia Civil y ya el día 30 de Enero habla de la casa de Seis Dedos como el lugar donde algunos revoltosos se hicieron fuertes, aparece la palabra "represión" y la cita literal de los vecinos "pedimos justicia, queremos que se castigue a los culpables". El día 31 de Enero se critica el latifundismo imperante en la zona. Por último, el día 23 de Febrero aparece un artículo de Álvarez de León en el que narra el acorralamiento político al que esta sometido el gobierno a raíz de los Sucesos,, termina con el párrafo siguiente: "La tragedia de Casas Viejas quedó flotando en el salón de sesiones como algo muy doloroso, muy terrible, que en estos momentos ha venido a poner su nota de amargura en este tablero político donde todos los materiales son aprovechados para construir los andamios del éxito y del fracaso."
martes, 8 de febrero de 2011
stalin
(Iosif o Jossif Vissariónovich Dzhugashvili) Dictador soviético (Gori, Georgia, 1879 - Moscú, 1953). Era hijo de un zapatero pobre y alcohólico de la región caucásica de Georgia, sometida a la Rusia de los zares. Quedó huérfano muy temprano y estudió en un seminario eclesiástico, de donde fue expulsado por sus ideas revolucionarias (1899). Entonces se unió a la lucha clandestina de los socialistas rusos contra el régimen zarista. Cuando en 1903 se escindió el Partido Socialdemócrata, siguió a la facción bolchevique que encabezaba Lenin.
Fue un militante activo y perseguido hasta el triunfo de la Revolución bolchevique de 1917, época de la que procede su sobrenombre de Stalin («hombre de acero»). La lealtad a Lenin y la falta de ideas propias le permitieron ascender en la burocracia del partido (rebautizado como Partido Comunista), hasta llegar a secretario general en 1922.
Stalin cmprendió entonces una pugna con Trotski por la sucesión de Lenin que, ya muy enfermo, moriría en 1924. Aunque el líder de la Revolución había indicado su preferencia por Trotski (pues consideraba a Stalin «demasiado cruel»), Stalin maniobró aprovechando su control sobre la información y sobre el aparato del Partido, aliándose con Zinoviev y Kamenev hasta imponerse a Trotski. La lucha por el poder se disfrazó de argumentos ideológicos, defendiendo cada bando una estrategia para consolidar el régimen comunista: la construcción del socialismo en un solo país (Stalin) contra la revolución permanente a escala mundial (Trotski).
Para Stalin lo esencial era la ambición de poder, pues una vez que eliminó a Trotski (al que mandó al exilio en 1929 y luego hizo asesinar en 1940), se desembarazó también del ala «izquierda» del partido (Zinoviev y Kamenev, ejecutados en 1936) y del ala «derecha» (Bujarin y Rikov, ejecutados en 1938) e instauró una sangrienta dictadura personal, apropiándose de las ideas políticas que habían sostenido sus rivales.
Stalin gobernó la Unión Soviética de forma tiránica desde los años treinta hasta su muerte, implantando el régimen más totalitario que haya existido jamás; pero también hay que atribuirle a él la realización del proyecto socioeconómico comunista en Rusia, la extensión de su modelo a otros países vecinos y la conversión de la URSS en una gran potencia.
Radicalizando las tendencias autoritarias presentes entre los bolcheviques desde la Revolución, acabó de eliminar del proyecto marxista-leninista todo rastro de ideas democráticas o emancipadoras: anuló todas las libertades, negó el más mínimo pluralismo y aterrorizó a la población instaurando un régimen policial. Dispuesto a eliminar no sólo a los discrepantes o sospechosos, sino a todo aquel que pudiera poseer algún prestigio o influencia propia, lanzó sucesivas purgas contra sus compañeros comunistas, que diezmaron el partido, eliminando a la plana mayor de la Revolución.
Con la misma violencia impuso la colectivización forzosa de la agricultura, hizo exterminar o trasladar a pueblos enteros como castigo o para solucionar problemas de minorías nacionales, y sometió todo el sistema productivo a la estricta disciplina de una planificación central obligatoria. Con inmensas pérdidas humanas consiguió, sin embargo, un crecimiento económico espectacular, mediante los planes quinquenales: en ellos se daba prioridad a una industrialización acelerada, basada en el desarrollo de los sectores energéticos y la industria pesada, a costa de sacrificar el bienestar de la población (sometida a durísimas condiciones de trabajo y a grandes privaciones en materia de consumo).
La represión impedía que se expresara el malestar de la población, apenas compensada con la mejora de los servicios estatales de transporte, sanidad y educación. A este precio consiguió Stalin convertir a la Unión Soviética en una gran potencia, capaz de ganar la Segunda Guerra Mundial (1939-45) y de compartir la hegemonía con los Estados Unidos en el orden bipolar posterior.
Stalin fue un político ambicioso y realista, movido por consideraciones de poder y no por ideales revolucionarios. Este maquiavelismo fue más palpable en su política exterior, donde la causa del socialismo quedó sistemáticamente postergada a los intereses nacionales de Rusia (convirtiendo a los partidos comunistas extranjeros en meros instrumentos de la política exterior soviética).
No tuvo reparos en firmar un pacto de no agresión con la Alemania nazi para asegurarse la tranquilidad en sus fronteras, el reparto de Polonia y la anexión de Estonia, Letonia y Lituania (Pacto Germano-Soviético de 1939). A pesar de todo, Hitler invadió la URSS, arrastrando a Stalin a la guerra en 1941. Stalin movilizó eficazmente las energías del país apelando a sus sentimientos nacionalistas (proclamó la Gran Guerra Patriótica): organizó la evacuación de la industria de las regiones occidentales hacia los Urales, adoptando una estrategia de «tierra quemada». Con ayuda del clima, de las grandes distancias y de la lucha guerrillera de los partisanos, debilitó a los alemanes hasta recuperarse y pasar a la contraofensiva a partir de la batalla de Stalingrado (1942-43). Después el avance ruso fue arrollador hasta llegar más allá de Berlín.
Reforzado por la victoria, Stalin negoció con los aliados (Estados Unidos y Gran Bretaña) el orden internacional de la posguerra (Conferencias de Yalta y Postdam, 1945), obteniendo el reconocimiento de la URSS como gran potencia (con derecho de veto en la ONU, por ejemplo). Los aliados tuvieron que aceptar la influencia soviética en Europa central y occidental, donde Stalin estableció un cordón de «Repúblicas populares» satélites de la URSS.
Stalin mantuvo la inercia de la guerra, retrasando la desmovilización de su ejército hasta el momento en que pudo disponer de armas atómicas (1953) y fomentando la extensión del comunismo a países en los que existieran movimientos revolucionarios autóctonos (como Grecia, Turquía, China, Corea…). La resistencia norteamericana a sus planes dio lugar a la «guerra fría», clima de tensión bipolar a escala mundial entre un bloque comunista y un bloque occidental capitalista, que perduraría hasta la desaparición de la URSS.
Vladimir Lenin
Lenin
(Vladimir Ilich Ulianov) Líder comunista ruso que dirigió la Revolución de octubre y creó el régimen comunista soviético (Simbirsk, 1870 - Nijni-Novgorod, 1924). Procedía de una familia de clase media de la región del Volga. Su animadversión contra el régimen zarista se exacerbó a partir de la ejecución de su hermano en 1887, acusado de conspiración. Estudió en las universidades de Kazán y San Petersburgo, en donde se instaló como abogado en 1893. Sus actividades contra la autocracia zarista le llevaron a entrar en contacto con el principal líder revolucionario ruso del momento, Plejáanov, en su exilio de Suiza (1895); fue él quien le convenció de la ideología marxista. Bajo su influencia, contribuyó a fundar en San Petersburgo la Liga de Combate por la Liberación de la Clase Obrera, embrión del Partido Obrero Socialdemócrata Ruso presidido por Plejánov.
En 1897, Lenin fue detenido y deportado a Siberia, donde se dedicó al estudio sistemático de las obras de Marx y Engels y elaboró su primer trabajo sobre la aplicación del pensamiento marxista a un país atrasado como Rusia (El desarrollo del capitalismo en Rusia). Tras su liberación en 1900 partió al exilio y fundó en Ginebra el periódico Iskra («La Chispa»), en colaboración con Plejánov; por entonces publicó la obra Qué hacer (1902), en donde defendió la posibilidad de hacer triunfar en Rusia una revolución socialista con tal de que estuviera dirigida por una vanguardia de revolucionarios profesionales decididos y organizados como un ejército. En el II Congreso del Partido Socialdemócrata Ruso (1903), impuso aquellas ideas al frente del grupo radical bolchevique, que defendía su modelo de partido fuertemente disciplinado como vanguardia de la revolución que creía viable a corto plazo; en 1912 quedaría confirmada definitivamente la ruptura con la minoría menchevique de Plejánov y Martov, apegada a un modelo de partido de masas que preparara las condiciones para el triunfo de la revolución obrera a más largo plazo, pasando antes por una etapa de democracia burguesa.
Lenin
En 1905 Lenin volvió a San Petersburgo para participar en la Revolución que había estallado en Rusia como consecuencia de la derrota en la Guerra Ruso-Japonesa; aunque el régimen zarista superó la crisis, Lenin consideró aquel movimiento como un «ensayo general» de la revolución socialista, del que apreció especialmente la forma organizativa espontánea de los revolucionarios rusos, como eran los sóviets o consejos populares. El fracaso de aquella revolución le obligó a exiliarse de nuevo en 1907. Luchó por atraer a sus posturas radicales a otros líderes socialistas, al tiempo que completaba un programa revolucionario de aplicación inmediata para Rusia: mezclando la herencia de Marx con la tradición insurreccionalista de Blanqui, propuso anticipar la revolución en Rusia por ser este uno de los «eslabones débiles» de la cadena capitalista, en donde un pequeño grupo de revolucionarios decididos y bien organizados podía arrastrar a las masas obreras y campesinas a una revolución, de la que saldría un Estado socialista. En El Estado y la Revolución (1917) Lenin definía ese Estado como una fase transitoria y necesaria de dictadura del proletariado, que habría de preparar el camino para el futuro comunista.
El estallido de la Primera Guerra Mundial (1914-18) le dio la oportunidad de poner en práctica sus ideas: definió la contienda como fruto de las contradicciones del capitalismo y del imperialismo (El imperialismo, fase superior del capitalismo, 1916) y, en nombre del internacionalismo proletario, llamó sin éxito al movimiento socialista mundial a transformar la contienda en una guerra civil generalizada; más tarde, el deterioro del régimen zarista por efecto de la guerra le permitió pensar en lanzar la revolución socialista en su país como primer paso para una era de revolución mundial.
Cuando la Revolución de febrero de 1917 derrocó al zar y llevó al gobierno a Kerenski, Lenin regresó apresuradamente a Rusia con la ayuda del ejército alemán (que veía en Lenin un agitador capaz de debilitar a su enemiga Rusia). Publicó sus Tesis de Abril ordenando a los bolcheviques cesar en el apoyo al gobierno provisional y preparar su propia revolución mediante la reclamación de «todo el poder para los sóviets». Un primer intento fracasado en julio le obligó a refugiarse en Finlandia, dejando que fuera Trotski quien dirigiera al partido para tomar el poder mediante un golpe de Estado en los primeros días de noviembre de 1917 (según el calendario occidental). El golpe se convirtió en la triunfante Revolución de octubre gracias a la estrategia bolchevique de centrar sus demandas en el fin de la guerra (lo que les atrajo el apoyo de los soldados y las clases populares) y el reparto de tierras (que les permitió contar con la simpatía del campesinado). Lenin regresó enseguida para presidir el nuevo gobierno o Consejo de Comisarios del Pueblo.
Como líder indiscutido del Partido (que en 1918 pasó a llamarse Partido Comunista), dirigió desde entonces la edificación del primer Estado socialista de la Historia. Cumplió sus promesas iniciales al apartar a Rusia de la guerra por la Paz de Brest-Litowsk (1918) y repartir a los campesinos tierras expropiadas a los grandes terratenientes. Pero, consciente del carácter minoritario de sus ideas radicales, demostrado por los resultados electorales, despreció la tradición democrática del socialismo occidental y adoptó una violenta dictadura de partido único, empleando métodos brutales de represión. Disolvió la Asamblea constituyente (1918), proscribió a la oposición y creó una policía política para perseguir a los disidentes; a escala mundial, exigió a los demás partidos socialistas fidelidad absoluta a sus directrices, provocando la escisión del movimiento obrero con la aparición en todos los países de partidos comunistas sometidos al control de una Tercera Internacional comunista (Komintern) con sede en Moscú (1919). Delegó en Trotski la organización del Ejército Rojo, con el que consiguió resistir al ataque combinado de los ejércitos blancos (contrarrevolucionarios) y la intervención extranjera en el curso de una larga Guerra Civil (1918-20). Una vez recuperado el control del antiguo imperio de los zares, articuló el territorio creando la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (1922), a la que dotó de organización formal por la Constitución de 1923.
Acuciado por las necesidades de la guerra, pero también siguiendo sus propias convicciones ideológicas, impuso una política de socialización inmediata de la economía, nacionalizando los principales medios de producción y sometiendo las actividades a una estricta planificación central (comunismo de guerra); las dificultades de una transformación tan radical (que nunca había sido prevista por Marx) provocaron el hundimiento de la producción y una desorganización general de la economía rusa. Lenin tuvo entonces el pragmatismo suficiente como para rectificar sus errores iniciales, convenciendo a su partido de la necesidad de introducir la Nueva Política Económica (1921), que consistió en volver atrás en el camino de la socialización, dejando un cierto margen para la libertad de mercado y la iniciativa privada (autorización de inversiones extranjeras, libertad de salarios…), con lo cual consiguió una apreciable recuperación económica.
Aquejado por una grave enfermedad, Lenin se fue retirando paulatinamente de la dirección política, mientras veía cómo sus colaboradores -especialmente Trotski y Stalin- iniciaban la disputa por la sucesión; antes de morir llegó a dejar constancia de su preocupación por la creciente burocratización del Partido y del Estado, así como por la ascensión de Stalin, del cual desconfiaba. Efectivamente, sería éste quien le sucediera, desvirtuando en parte la herencia política del fundador del Estado soviético.
La URSS sobrevivió a su creador bajo un régimen comunista hasta 1991; entretanto, el movimiento comunista (basado en la ideología marxista-leninista) se extendió por todo el mundo, inspirando revoluciones y regímenes políticos tan importantes como los implantados en Europa central y oriental, China, Cuba, Vietnam, etc.
La figura de Lenin fue objeto de un culto semirreligioso bajo el régimen soviético: su cuerpo fue embalsamado y expuesto en un mausoleo en la Plaza Roja de Moscú; su ciudad natal fue rebautizada en su honor como Ulianovsk y la capital en donde desarrolló su lucha política (San Petersburgo o Petrogrado) cambió su nombre por el de Leningrado
Espartaquistas Alemanes
Espartaquistas, grupo de socialistas revolucionarios alemanes, formado en 1916, cuyos principales dirigentes eran Rosa Luxemburg y Karl Liebknecht. En un principio, fue una corriente izquierdista del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), a cuyos líderes criticaron los espartaquistas por apoyar la política alemana que condujo a la I Guerra Mundial. Consideraban que dicho apoyo a la guerra era una traición al socialismo y a las revoluciones pacifistas de la II Internacional. El grupo abogaba por la acción conjunta de los trabajadores de los países en guerra para poner término a la lucha y derrocar al sistema capitalista. Recibieron el nombre de espartaquistas cuando Liebknecht firmó una serie de artículos contrarios a la guerra con el seudónimo de Espartaco, nombre del líder de una famosa rebelión de esclavos que tuvo lugar en la antigua Roma. En 1917, el ala izquierda del SPD fundó el Partido Socialdemócrata Alemán Independiente (USPD), del cual también se separaron los espartaquistas después de protagonizar la revolución de octubre de 1918, que, junto con la abdicación del emperador Guillermo II, contribuyó a la extinción del II Imperio (o Reich) Alemán.
Después del establecimiento de la República de Weimar en noviembre de 1918, con Friedrich Ebert, líder moderado del SPD, los espartaquistas permanecieron fuera del nuevo gobierno. Siguieron una política de oposición violenta, y durante un encuentro celebrado entre el 30 de diciembre de 1918 y el 1 de enero de 1919, los espartaquistas se convirtieron en el Partido Comunista Alemán (KPD). En enero de 1919, los espartaquistas organizaron un levantamiento, inspirado por el triunfo bolchevique en Rusia, que tuvo su principal foco en Berlín y que fue reprimido por tropas del gobierno. Liebknecht y Luxemburg fueron detenidos y ejecutados.
martes, 25 de enero de 2011
atentado de sarajevo
La organización secreta la "Mano negra", al comenzar 1914 tenía ya el proyecto de atentar en contra de Francisco-José y el rey Fernando de Bulgaria. Cuando los responsables de la organización terrorista se enteran en mayo de ese año que el archiduque Francisco-Fernando debe viajar a Bosnia para supervisar las maniobras militares, una elección rápida se hace para designar a los terroristas que participarán en el acto magnicida. Entre las condiciones a cumplir, el "candidato" al magnicidio debe ser nacido en Bosnia, que tenga menos de veinte años de edad - lo que le evitaría ser condenado a muerte si era atrapado después del atentado- y estar dispuesto a sacrificar su vida por el ideal de la gran Serbia. Los tres jóvenes serbios elegidos serán: Subrilovič, Grabege y Gavrilo Princip; a este último, con tuberculosis, se le consideraba que no viviría mucho tiempo más. Los tres habían sido fanatizados por la "Gran Serbia" y eran miembros de la asociación "Joven Bosnia" controlada por la "Mano negra". El jefe de la "Mano negra", ApisDimitrijević, dirige todas las operaciones junto al embajador ruso en Belgrado, Harvig, quien hace traer desde San Petersburgo tres cápsulas de cianuro para ser utilizadas por los terroristas si llegan a caer prisioneros. Estos van a Belgrado para recibir todas las instrucciones y las armas que utilizarán en el crimen. Antes de regresar a Sarajevo el 2 de Junio de 1914, con las cápsulas de cianuro, son recibidos por Alejandro Karageorgevich, quien ya a tomado el poder gracias a la "Mano negra" que le ha facilitado el camino neutralizando al viejo Pedro I desde 1911.
Esperando la llegada de Francisco-Fernando, los terroristas se alojan en un hotel de Sarajevo, cuyo propietario es el tío del embajador serbio Spalajković en San Petersburgo. El 28 de Junio de 1914, día de San Guido (Vidov Dan), aniversario del desastre de Kosovo en 1389, el principe heredero de AustriaHungría, el archiduque Francisco-Fernando acompanado de su esposa la duquesa Sofia de Hoheberg, es recibido por la ciudad de Saraj evo a donde llega en visita de inspección por las maniobras que está realizando su ejército. Ese día, domingo en la mañana, hacia las diez horas, en la ciudad en donde la visita había sido mal preparada y con un servicio de seguridad muy débil, ocho jóvenes serbios, repartidos en dos grupos, esperaban la pasada de la comitiva real y el archiduque, que debían dirigirse al edificio del Ayuntamiento de la ciudad. Avanzando por la avenida de la Miljačka (miliachka), el cortejo - dos vehículos descapotados y dos de escolta - pasa ante el primer grupo: Gavrilović lanza una bomba sobre el automóvil de Francisco-Fernando, falla, pero hiere gravemente a un oficial austríaco del segundo vehículo. El cortejo acelera hacia el Ayuntamiento en donde Francisco-Fernando, furioso, le grita al alcalde:
Esperando la llegada de Francisco-Fernando, los terroristas se alojan en un hotel de Sarajevo, cuyo propietario es el tío del embajador serbio Spalajković en San Petersburgo. El 28 de Junio de 1914, día de San Guido (Vidov Dan), aniversario del desastre de Kosovo en 1389, el principe heredero de AustriaHungría, el archiduque Francisco-Fernando acompanado de su esposa la duquesa Sofia de Hoheberg, es recibido por la ciudad de Saraj evo a donde llega en visita de inspección por las maniobras que está realizando su ejército. Ese día, domingo en la mañana, hacia las diez horas, en la ciudad en donde la visita había sido mal preparada y con un servicio de seguridad muy débil, ocho jóvenes serbios, repartidos en dos grupos, esperaban la pasada de la comitiva real y el archiduque, que debían dirigirse al edificio del Ayuntamiento de la ciudad. Avanzando por la avenida de la Miljačka (miliachka), el cortejo - dos vehículos descapotados y dos de escolta - pasa ante el primer grupo: Gavrilović lanza una bomba sobre el automóvil de Francisco-Fernando, falla, pero hiere gravemente a un oficial austríaco del segundo vehículo. El cortejo acelera hacia el Ayuntamiento en donde Francisco-Fernando, furioso, le grita al alcalde:
martes, 18 de enero de 2011
senderos de gloria
Francia, 1916. El punto más álgido de la I Guerra Mundial. El coronel Dax participa con sus hombres en un ataque suicida contra las posiciones alemanas en Agnoc, que acaba en un rotundo fracaso. Para escarmentar a las tropas, el general Mirbeau somete a consejo de guerra a tres de los supervivientes del ataque, acusados de cobardía.
En uno de sus trabajos más redondos, Stanley Kubrick reconstruye un oscuro episodio real, recogido en una novela de Humphrey Cobb. Prohibida por el gobierno francés de la época, realiza un sentido alegato contra los horrores de la guerra, al tiempo que reflexiona sobre el idealismo, la justicia, la insubordinación y el valor de la vida humana.
Argumento de Senderos de Gloria
Fuera de peligro, en su tranquilo castillo situado lejos de las líneas de batalla, un grupo de Generales Franceses trasmiten una orden directa al Coronel Dax: tomar el difícil reducto de Ant Hill a cualquier precio. Pero este ataque es una misión suicida que desde el principio está condenada al fracaso. Para justificar su fatal metedura de pata, los generales ordenan el arresto de tres soldados inocentes, culpándoles de cobardía y desacato a las órdenes emitidas. Dax, elegido abogado defensor de los tres soldados, pronto se dará cuenta de que solamente un milagro podrá salvarles del pelotón de ejecución, a no ser que demuestre que los generales son los culpables. Senderos de Gloria es una obra maestra e irresistible, del aclamado director Stanley Kubrick. Una obra devastadora y magistral que trata sobre el procesamiento de políticos militares al mismo tiempo que es una experiencia cinematográfica inolvidable
En uno de sus trabajos más redondos, Stanley Kubrick reconstruye un oscuro episodio real, recogido en una novela de Humphrey Cobb. Prohibida por el gobierno francés de la época, realiza un sentido alegato contra los horrores de la guerra, al tiempo que reflexiona sobre el idealismo, la justicia, la insubordinación y el valor de la vida humana.
Argumento de Senderos de Gloria
Fuera de peligro, en su tranquilo castillo situado lejos de las líneas de batalla, un grupo de Generales Franceses trasmiten una orden directa al Coronel Dax: tomar el difícil reducto de Ant Hill a cualquier precio. Pero este ataque es una misión suicida que desde el principio está condenada al fracaso. Para justificar su fatal metedura de pata, los generales ordenan el arresto de tres soldados inocentes, culpándoles de cobardía y desacato a las órdenes emitidas. Dax, elegido abogado defensor de los tres soldados, pronto se dará cuenta de que solamente un milagro podrá salvarles del pelotón de ejecución, a no ser que demuestre que los generales son los culpables. Senderos de Gloria es una obra maestra e irresistible, del aclamado director Stanley Kubrick. Una obra devastadora y magistral que trata sobre el procesamiento de políticos militares al mismo tiempo que es una experiencia cinematográfica inolvidable
domingo, 16 de enero de 2011
Guerra de las trincheras
El primer desarrollo crítico para la aparición de la guerra de trincheras fue la introducción de los ejércitos de reclutamiento masivo, que aparecieron en la Revolución francesa y en las Guerras Napoleónicas. Antes de esto, los ejércitos consistían en un pequeño número de tropas que eran incapaces de defender un amplio territorio durante mucho tiempo. Las batallas eran breves, o degeneraban en guerras de asedio. La aparición de los grandes ejércitos hizo mucho más difícil que uno pudiese sobrepasar el flanco del otro, aunque todavía podía conseguirse, mediante cargas de caballería e infantería, que uno de ellos acabase rompiendo la formación del otro a través de un asalto directo. Un ejemplo de línea militar fortificada que se alargaba durante muchos kilómetros eran las líneas de Torres Vedras (1810), construidas por los portugueses bajo la dirección de los Ingenieros de la Armada Británica, durante la guerra contra Napoleón Bonaparte.
Lo que hizo que esta táctica fuese cada vez más suicida fue el desarrollo de armas de fuego cada vez de mayor poder a mediados del siglo XIX. Cuando comenzó la Guerra Civil Estadounidense, en 1861, se luchó con las mismas tácticas utilizadas en la era de Napoleón y durante siglos antes. Cuando la guerra llegaba a su sangriento final en 1865, se había convertido en un previo de la Primera Guerra Mundial, con trincheras, ametralladoras, fortificaciones de campo y bajas masivas. La batalla de Petersburg, cercana al final de la guerra, con sus trincheras y formaciones estáticas, contrasta con las primeras batallas, como la primera batalla de Bull Run, en donde las maniobras todavía eran posibles. Las famosas cargas de caballería, como la carga de Pickett en la batalla de Gettysburg, demostraron la inutilidad de un asalto directo contra una línea enemiga bien colocada.
Lo que hizo que esta táctica fuese cada vez más suicida fue el desarrollo de armas de fuego cada vez de mayor poder a mediados del siglo XIX. Cuando comenzó la Guerra Civil Estadounidense, en 1861, se luchó con las mismas tácticas utilizadas en la era de Napoleón y durante siglos antes. Cuando la guerra llegaba a su sangriento final en 1865, se había convertido en un previo de la Primera Guerra Mundial, con trincheras, ametralladoras, fortificaciones de campo y bajas masivas. La batalla de Petersburg, cercana al final de la guerra, con sus trincheras y formaciones estáticas, contrasta con las primeras batallas, como la primera batalla de Bull Run, en donde las maniobras todavía eran posibles. Las famosas cargas de caballería, como la carga de Pickett en la batalla de Gettysburg, demostraron la inutilidad de un asalto directo contra una línea enemiga bien colocada.
miércoles, 12 de enero de 2011
La batalla naval de Filipinas
#1 · ▲Las Batallas navales de Filipinas
Hace un tiempo que tenia ganas de armar la campaña de Filipinas 1944 en lo referente a las batallas aeronavales, como Uds. Saben (y si no lo sabian, ahora lo van a saber), la recuperacion de las Filipinas por parte de EEUU fue consecuencia de la vieja promesa de Douglas McArthur (el famoso “volveré”) de 1942.
En un primer momento, hubo intencion del Comando Naval de EEUU, debido a la existencia aun de fuerzas japonesas aeronavales poderosas, de “saltear” la isla y pasar a otra menos fortificada, para de esta manera, dejar que se queden sin suministros.
McArthur se opusó tenazmente aferrandose a su promesa, tanta fue la oposición de Mc Arthur que cuentan que amenazó con dejar su comando si no se atacaban las Filipinas en Octubre de 1944.
Finalmente se planeó la invasión, ataque que slos japoneses esperaban, esperando llevarse una gloria mas para su Armada mediante un exacto plan que necesitaba que muchas piezas encajasen…
Las fuerzas japonesas: Kurita: los acorazados Yamato, Musashi, Nagato, cruceros pesados; Chokai, Atago, Maya, Takao, Myoko, Haguro, un crucero ligero y 9 destructores. La Fuerza B, junto a esta, con el Alm. Suzuki, dos cruceros de batalla: Kongo y Harina, 4 cruceros pesados: Kumano, Suzuya, Tone y Chikuma, 1 crucero ligero y 6 destructores. Separada de esta, la fuerza de Nishimura, con los acorazados Fuso y Yamashiro, el crucero Mogami y 4 destructores, cerca de esta, la fuerza del Alm. Shima con los cruceros pesados Nachi y Ashigara, 1 crucero ligero y 8 destructores.
Ozawa venia desde Japon con los portaaviones Zuikaku (ultimo sobreviviente del ataque a Pearl Harbor), Zuiho, Chitose y Chiyoda con solo 80 Zeros, cascaras vacias como carnada, escoltados por los acorazados/portaaviones Ise y Hyuga, 3 cruceros ligeros y 10 destructores
El plan era simple, por el sur se acercaría la fuerza del Almirante Takeo Kurita con la creme de la creme de la Flota Combinada, una tremenda fuerza con los cruceros pesados modernos, cruceros de batalla y acorazados, cuales?, los Yamato y el Musashi, los navios mas poderosos de la epoca, con cañones de 460mm. Esta fuerza se separaba de Nishimura y Shima que iban a ingresar por el Estrecho de San Bernardino en otro horario, compuesta tambien por acorazados viejos y cruceros. Mientras esto pasaba, desde el Norte se acercaba una carnada enorme, los portaaviones japoneses restantes, para atraer a la escolta americana y vender cara su derrota, mientras los americanos se iban al norte, los japoneses desde el sur esperaban encontrara los buques de transporte de trpas y portaaviones escolta solos para acribillarlos…..si, ya se, un plan bastante utopico… pero cuidado, no vamos a adelantar nada, pero casi, casi se les da.
La Primera Batalla: La Batalla aeronaval del Palawan y el Mar de Sibuyán
La flota Japonesa fu{e avistada el 21 de Octubre cuando los submarinos americanos Darter y Dace tuvieron un eco radar con muchisimos buques grandes a menos de 30 kilometros, comenzaron a acechar y enorme fue su sorpresa cuando vieron por periscopio a la totalidad de los barcos de superficie importantes del Japon (sin portaaviones). A las 5:30 del 23 de Octubre finalmente atacaron, el USS Darter una salva completa de 6 torpedos al buque insignia, el nuevo crucero pesado ATAGO, después viró en redondo y disparó cuatro torpedos de popa contra el segundo buque de la fila, el crucero TAKAO, a los pocos minutos, el ATAGO se hunde al recibir 4 de los torpedos con casi 400 hombres a bordo, mientras el TAKAO impactado por dos, se retira a base con dos destructores de escolta…. Faltaba el turno del USS Dace, que aceirta con 4 torpedos al crucero MAYA que se hunde en 4 minutos con enorme mortandad, Kurita sufre un ataque fulminante en cinco minutos pierde tres modernos cruceros y se desprende de dos destructores. Lo peor de esto consiste en el haber sido descubierto.
Los submarinos comienzan a perseguir al TAKAO para rematarlo, pero el USS Darter encalla, debiendo ser rescatada su tripulacion por el USS DACE, realmente una actuación impresionante de estos dos submarinos americanos, increíble su hazaña… pero esto no hacia sino comenzar.
A todo esto, la Flota solo habia ingresado en el Mar de Sibuyan…. Halsey, comandante de la flota americana, estaba avisado entonces de la aparicion de los acorazados japoneses, ordenó el inmediato desplazamiento de los modernos portaaviones rapidos USS ESSEX y USS LEXINGTON junto a los livianos USS PRINCETON y USS LANGLEY escoltados por los acorazados USS MASSACHUSSETS y USS SOUTH DAKOTA y cuatro cruceros antiaereos, BIRMINGHAM, RENO, MOBILE Y SANTA FE, mas una cortina de destructores, esta paso a ser la Task Force 38.3 comandada por el Almirante Freddy “fighting” Sherman”, formó la TF38.2 con los portaaviones USS INTREPID, USS CABOT Y USS INDEPENDENCE y los poderosisimos acorazados USS IOWA Y USS NEW JERSEY, la TF 38.4 con los portaaviones USS FRANKLIN, BELLEAU WOOD, USS ENTERPRISE Y USS SAN JACINTO, todas estas TF estaban escoltadas por cruceros pesados y ligeros AA y por destructores, la trampa estaba cerrandose….
Los Avenger y Helldivers escoltados por Hellcats de estos tres grupos despegaron de los 11 portaaviones (5 de escuadra y 6 livianos)encontrando sin problemas a la fuerza japonesa el 24 de Octubre a las 8:00 , iba a ser un largo dia… Para empezar el atque se demoró ante la llegada de un ataque tde aviones basados entierra de los japoneses, destrozados por los americanos y su temible Grumman Hellcat. Sin embargo, un solitario avion Judy pudo esconderse entre las nubes de sus cazadores y atacó al portaaviones USS PRINCETON
Una sola bombra japonesa de 225 kilos impactó la cubierta del portaaviones y lo estremecio, causando multiples explosiones de gasolina y explosivos amontonados para el atque a la flota japonesa, el Princeton se detuvo sin energía y se acercó el crucero USS BIRMINGHAM para colaborar a apargar el incendio, la tripulacion del crucero estaba mayormente en cubierta colaborando con los incendios del portaaviones cuando una tremenda explosion desgarró el casco del PRINCETON, barriendo la cubierta del crucero con pedazos de metal, este ataque solitario causó en definitiva cientos de muertos en ambos barcos. El PRINCETON fue rematado por los torpedos del USS RENO.
A todo esto, los otros dos grupos ya estaban atacando, comenzaron los aviones del INTREPID y el CABOT (este es el posterior Dedalo, cierto?), dos torpedos en el crucero MYOKO y uno en el enorme acorazado MUSASHI que a lo largo del dia recibió la concentración del ataque, con cerca de 10 torpedos y una docena de bombas, hasta que se hundio cayendo la noche con 1200 hombres.
Sin embargo, hubo un par de hechos notables: la flota japonesa seguia avanzando a pesar de haber perdido al MUSASHI y regresado al crucero MYOKO, pero KORITA decidio dar la vuelta, esto engañó a los americanos que consideraron que el daño era tremendo y se estaba retirando, al mismo tiempo se detectó la flota del Alm. OZAWA por el Norte, con acorazados y portaaviones.
A ver, analicemos que pasaba por acá y por la mente de Halsey…
1.-Los capitanes del DARTER y DACE afirmaron haber hundido dos acorazados y dos cruceros pesados (en realidad hundieron dos pesados y averiaron otro, ningun acorazado)
2.-Los pilotos que regresaban del ataque afirmaron haber destrozado la flota japonesa, hundiendo los dos acorazados clase Yamato (en realidad atacaron en ambos ataques al Musashi, pero no podian creer que resistiera tanto), dos cruceros de batalla y cuetro cruceros…. Según las cuentas de Halsey, ya no quedaba nada de la flota japonesa que pudiese considerar amenaza, salvo la del Norte….. Ozawa.
Por eso decidió mandar todos sus efectivos a una carrera al norte a fin de perseguir la unica flota japonesa que según el existia aun, la del Norte, dejando allanado el camino para el regreso de Kurita y el Yamato para acribillar a los desembarcos y portaaviones escolta…pero eso es otro cuento.
Hace un tiempo que tenia ganas de armar la campaña de Filipinas 1944 en lo referente a las batallas aeronavales, como Uds. Saben (y si no lo sabian, ahora lo van a saber), la recuperacion de las Filipinas por parte de EEUU fue consecuencia de la vieja promesa de Douglas McArthur (el famoso “volveré”) de 1942.
En un primer momento, hubo intencion del Comando Naval de EEUU, debido a la existencia aun de fuerzas japonesas aeronavales poderosas, de “saltear” la isla y pasar a otra menos fortificada, para de esta manera, dejar que se queden sin suministros.
McArthur se opusó tenazmente aferrandose a su promesa, tanta fue la oposición de Mc Arthur que cuentan que amenazó con dejar su comando si no se atacaban las Filipinas en Octubre de 1944.
Finalmente se planeó la invasión, ataque que slos japoneses esperaban, esperando llevarse una gloria mas para su Armada mediante un exacto plan que necesitaba que muchas piezas encajasen…
Las fuerzas japonesas: Kurita: los acorazados Yamato, Musashi, Nagato, cruceros pesados; Chokai, Atago, Maya, Takao, Myoko, Haguro, un crucero ligero y 9 destructores. La Fuerza B, junto a esta, con el Alm. Suzuki, dos cruceros de batalla: Kongo y Harina, 4 cruceros pesados: Kumano, Suzuya, Tone y Chikuma, 1 crucero ligero y 6 destructores. Separada de esta, la fuerza de Nishimura, con los acorazados Fuso y Yamashiro, el crucero Mogami y 4 destructores, cerca de esta, la fuerza del Alm. Shima con los cruceros pesados Nachi y Ashigara, 1 crucero ligero y 8 destructores.
Ozawa venia desde Japon con los portaaviones Zuikaku (ultimo sobreviviente del ataque a Pearl Harbor), Zuiho, Chitose y Chiyoda con solo 80 Zeros, cascaras vacias como carnada, escoltados por los acorazados/portaaviones Ise y Hyuga, 3 cruceros ligeros y 10 destructores
El plan era simple, por el sur se acercaría la fuerza del Almirante Takeo Kurita con la creme de la creme de la Flota Combinada, una tremenda fuerza con los cruceros pesados modernos, cruceros de batalla y acorazados, cuales?, los Yamato y el Musashi, los navios mas poderosos de la epoca, con cañones de 460mm. Esta fuerza se separaba de Nishimura y Shima que iban a ingresar por el Estrecho de San Bernardino en otro horario, compuesta tambien por acorazados viejos y cruceros. Mientras esto pasaba, desde el Norte se acercaba una carnada enorme, los portaaviones japoneses restantes, para atraer a la escolta americana y vender cara su derrota, mientras los americanos se iban al norte, los japoneses desde el sur esperaban encontrara los buques de transporte de trpas y portaaviones escolta solos para acribillarlos…..si, ya se, un plan bastante utopico… pero cuidado, no vamos a adelantar nada, pero casi, casi se les da.
La Primera Batalla: La Batalla aeronaval del Palawan y el Mar de Sibuyán
La flota Japonesa fu{e avistada el 21 de Octubre cuando los submarinos americanos Darter y Dace tuvieron un eco radar con muchisimos buques grandes a menos de 30 kilometros, comenzaron a acechar y enorme fue su sorpresa cuando vieron por periscopio a la totalidad de los barcos de superficie importantes del Japon (sin portaaviones). A las 5:30 del 23 de Octubre finalmente atacaron, el USS Darter una salva completa de 6 torpedos al buque insignia, el nuevo crucero pesado ATAGO, después viró en redondo y disparó cuatro torpedos de popa contra el segundo buque de la fila, el crucero TAKAO, a los pocos minutos, el ATAGO se hunde al recibir 4 de los torpedos con casi 400 hombres a bordo, mientras el TAKAO impactado por dos, se retira a base con dos destructores de escolta…. Faltaba el turno del USS Dace, que aceirta con 4 torpedos al crucero MAYA que se hunde en 4 minutos con enorme mortandad, Kurita sufre un ataque fulminante en cinco minutos pierde tres modernos cruceros y se desprende de dos destructores. Lo peor de esto consiste en el haber sido descubierto.
Los submarinos comienzan a perseguir al TAKAO para rematarlo, pero el USS Darter encalla, debiendo ser rescatada su tripulacion por el USS DACE, realmente una actuación impresionante de estos dos submarinos americanos, increíble su hazaña… pero esto no hacia sino comenzar.
A todo esto, la Flota solo habia ingresado en el Mar de Sibuyan…. Halsey, comandante de la flota americana, estaba avisado entonces de la aparicion de los acorazados japoneses, ordenó el inmediato desplazamiento de los modernos portaaviones rapidos USS ESSEX y USS LEXINGTON junto a los livianos USS PRINCETON y USS LANGLEY escoltados por los acorazados USS MASSACHUSSETS y USS SOUTH DAKOTA y cuatro cruceros antiaereos, BIRMINGHAM, RENO, MOBILE Y SANTA FE, mas una cortina de destructores, esta paso a ser la Task Force 38.3 comandada por el Almirante Freddy “fighting” Sherman”, formó la TF38.2 con los portaaviones USS INTREPID, USS CABOT Y USS INDEPENDENCE y los poderosisimos acorazados USS IOWA Y USS NEW JERSEY, la TF 38.4 con los portaaviones USS FRANKLIN, BELLEAU WOOD, USS ENTERPRISE Y USS SAN JACINTO, todas estas TF estaban escoltadas por cruceros pesados y ligeros AA y por destructores, la trampa estaba cerrandose….
Los Avenger y Helldivers escoltados por Hellcats de estos tres grupos despegaron de los 11 portaaviones (5 de escuadra y 6 livianos)encontrando sin problemas a la fuerza japonesa el 24 de Octubre a las 8:00 , iba a ser un largo dia… Para empezar el atque se demoró ante la llegada de un ataque tde aviones basados entierra de los japoneses, destrozados por los americanos y su temible Grumman Hellcat. Sin embargo, un solitario avion Judy pudo esconderse entre las nubes de sus cazadores y atacó al portaaviones USS PRINCETON
Una sola bombra japonesa de 225 kilos impactó la cubierta del portaaviones y lo estremecio, causando multiples explosiones de gasolina y explosivos amontonados para el atque a la flota japonesa, el Princeton se detuvo sin energía y se acercó el crucero USS BIRMINGHAM para colaborar a apargar el incendio, la tripulacion del crucero estaba mayormente en cubierta colaborando con los incendios del portaaviones cuando una tremenda explosion desgarró el casco del PRINCETON, barriendo la cubierta del crucero con pedazos de metal, este ataque solitario causó en definitiva cientos de muertos en ambos barcos. El PRINCETON fue rematado por los torpedos del USS RENO.
A todo esto, los otros dos grupos ya estaban atacando, comenzaron los aviones del INTREPID y el CABOT (este es el posterior Dedalo, cierto?), dos torpedos en el crucero MYOKO y uno en el enorme acorazado MUSASHI que a lo largo del dia recibió la concentración del ataque, con cerca de 10 torpedos y una docena de bombas, hasta que se hundio cayendo la noche con 1200 hombres.
Sin embargo, hubo un par de hechos notables: la flota japonesa seguia avanzando a pesar de haber perdido al MUSASHI y regresado al crucero MYOKO, pero KORITA decidio dar la vuelta, esto engañó a los americanos que consideraron que el daño era tremendo y se estaba retirando, al mismo tiempo se detectó la flota del Alm. OZAWA por el Norte, con acorazados y portaaviones.
A ver, analicemos que pasaba por acá y por la mente de Halsey…
1.-Los capitanes del DARTER y DACE afirmaron haber hundido dos acorazados y dos cruceros pesados (en realidad hundieron dos pesados y averiaron otro, ningun acorazado)
2.-Los pilotos que regresaban del ataque afirmaron haber destrozado la flota japonesa, hundiendo los dos acorazados clase Yamato (en realidad atacaron en ambos ataques al Musashi, pero no podian creer que resistiera tanto), dos cruceros de batalla y cuetro cruceros…. Según las cuentas de Halsey, ya no quedaba nada de la flota japonesa que pudiese considerar amenaza, salvo la del Norte….. Ozawa.
Por eso decidió mandar todos sus efectivos a una carrera al norte a fin de perseguir la unica flota japonesa que según el existia aun, la del Norte, dejando allanado el camino para el regreso de Kurita y el Yamato para acribillar a los desembarcos y portaaviones escolta…pero eso es otro cuento.
La batalla naval de Santiago de Cuba
El desastre naval de Santiago de Cuba (3 julio 1898). Por Ricardo Peytaví:
Es una ciudad de calles estrechas y casas bajas, aplastada por un calor canicular casi todos los días del año. Da la sensación como en muchos otros lugares del país, de que el reloj se paró en enero de 1959, o quizá mucho antes; si no fuese por el tráfico rodado, la expansión de los barrios periféricos y otros pocos símbolos adicionales de una modernidad raquítica, se diría que Santiago de Cuba conserva el aspecto que tendría aquel domingo 3 de julio de 1898, hace hoy exactamente cien años, el día en que lo poco que quedaba de la Armada española se disponía a un sacrificio inevitable frente a la escuadra norteamericana.
Salida a plena luz del día:
Eran las nueve y media de la mañana cuando el crucero acorazado Infanta María Teresa, buque insignia del almirante Pascual Cervera, abandonaba la bahía de Santiago de Cuba. La batalla comenzó inmediatamente: a las 9,35 el "Teresa" abrió fuego sobre un acorazado norteamericano, aunque su intención era dirigirse a toda máquina hacia el Brooklyn, al que interesaba poner fuera de combate enseguida por ser el navío más rápido de la escuadra enemiga. Detrás del "Teresa" salieron en fila india (no había otra posibilidad por las características de la bahía) los también cruceros acorazados Vizcaya, Cristóbal Colón y Almirante Oquendo, con la intención de huir rápidamente hacia el oeste. Por último se hicieron a la mar los destructores Furor y Plutón, que no tenían ninguna opción ante la potencia de fuego de Estados Unidos.
El único barco que podía, en principio, ponerse a salvo era el Cristóbal Colón, al ser el más rápido de ambas flotas. Estuvo a punto de conseguirlo, pero al consumir todo el carbón de calidad, tuvo que emplear otro de menor poder calorífico; perdió velocidad y fue alcanzado por los acorazados enemigos. Su comandante decidió embarrancarlo a las 13,54 en las proximidades de la desembocadura del río Turquino, a 48 millas (89 kilómetros) de Santiago. La suerte de los otros cruceros fue similar. El "Teresa", aunque en principio hizo huir al Brooklyn, sucumbió bajo el fuego del Indiana y el Oregon. El "Oquendo" y los dos destructores sufrieron un intenso castigo desde que abandonaron la bahía y quedaron fuera de combate en poco tiempo. El Vizcaya, alcanzado por varias andanadas, decidió encallar en el Aserradero, donde le explotaron las calderas y los pañoles de munición poco después de las once de la mañana. En algo más de cuatro horas, la escuadra española del Atlántico quedó aniquilada.
Aunque la cifra de bajas nunca se han considerado muy exactas, en el bando español hubo 332 muertos y 197 heridos; en el norteamericano un muerto y unos pocos heridos. Los daños que sufrieron los navíos de EE.UU. fueron escasos. Jamás se había visto algo parecido en la historia naval. Muchas toneladas de papel se han impreso en los últimos cien años para tratar de explicar lo sucedido aquel día. En la parte española siempre ha prevalecido la idea de que la escuadra del almirante Cervera se enfrentaba a una fuerza infinitamente superior, y que sus barcos eran viejos y estaban mal equipados, pero eso no es del todo cierto. El "Teresa", el Vizcaya y el "Oquendo" habían entrado en servicio en 1893, sólo cinco años antes, mientras que el "Colón", el Furor y el Plutón fueron botados el año anterior. Los barcos españoles tenían una coraza y armamento más ligeros que los norteamericanos, pero también eran más rápidos. Se trataba en ambos casos de flotas modernas aunque construidas con una concepción distinta. España necesitaba buques capaces de trasladarse con rapidez a sus posesiones de ultramar, no sólo en el Caribe, sino también al otro lado del mundo, en Filipinas. Estados Unidos, al carecer de un imperio ultramarino, optó por barcos más pesados pero también menos ágiles. En principio, ninguna de las dos armadas tenía ventaja sobre la otra. Todo dependía del tipo de combate naval que se entablase, pero tanto en Cavite (Filipinas) como en Santiago de Cuba, las circunstancias le dieron una ventaja aplastante a los navíos yanquis.
El justificado pesimismo de Cervera:
A estas alturas, los historiadores tienen pocas dudas de ue el pesimismo secular de Pascual Cervera fue decisivo no ya para la derrota en sí (algo difícil de evitar), sino para la forma tan rápida con que ésta se produjo. Cervera fue a Cuba a regañadientes. El 20 de abril de 1898, cuando la flota española se reunió en las islas de Cabo Verde, le recomendó al ministro de Marina que en vez de zarpar rumbo al Caribe, resultaba más aconsejable trasladar la escuadra a Canarias, para defender este archipiélago (e incluso costas peninsulares) de un posible ataque norteamericano. Sin embargo, el 24 de abril el Gobierno le ordenó que saliese hacia las Antillas. En el mismo mensaje se le informó que la bandera de estados Unidos era enemiga. Cervera preparó los barcos y zarpó el 29 de abril. Antes, le escribió una carta a su hermano en la que, entre otras cosas, le decía :
"Vamos a un sacrificio tan estéril como inútil; y si en él muero, como parece seguro, cuida de mi mujer y de mis hijos.
El pesimismo de Cervera contrasta con la euforia que se vivía en España- la población, enardecida por una prensa patriotera, estaba convencida de que la escuadra española no sólo derrotaría a la norteamericana, sino que incluso bombardearía y bloquearía algunos puertos de ese país. El 19 de mayo la escuadra norteamericana arribó al puerto de Santiago de Cuba. Era un lugar seguro, donde al enemigo le resultaba casi imposible entrar, pero del que resultaría muy difícil salir si la escuadra norteamericana establecía un bloqueo, como así fue. El 25 de mayo, Cervera envió un telegrama al ministro de Marina en estos términos:
"Estamos bloqueados. Califiqué de desastrosa la venida para los intereses de la Patria. Los hechos empiezan a darme la razón. Con la desproporción de fuerzas, es imposible ninguna acción eficaz. Tenemos víveres para un mes".
Lo que ocurrió entre esa fecha y el 3 de julio ha dado pie a debates apasionados a lo largo de un siglo. La pregunta es por qué salió Cervera si las posibilidades de escapar eran mínimas, y la respuesta siempre es la misma: porque se lo ordenaron. La propia defensa de la ciudad ya resultaba delicada. Parte de la dotación de los barcos fue desembarcada para apoyar a la infantería y luego reembarcada justo antes de que la escuadra se hiciera a la mar. Se corría el riesgo de que las tropas yanquis, apoyadas por los mambises, se apoderasen de la entrada de la bahía y encerrasen a la escuadra. Otros historiadores, como el cubano Enrique Pérez-Cisneros, hablan de que el Gobierno de Madrid temía que Cervera se rindiera sin combatir. En la metrópoli se prefería una derrota honrosa en el mar. Sea como fuese, resulta incomprensible que los barcos españoles zarpasen a primera hora de una larga jornada de verano, en vez de aprovechar la oscuridad de la noche o incluso un día de mal tiempo que dificultase el bloqueo. Lejos de eso, se enfrentaron a una poderosa escuadra en el peor momento, eso sí, después de haber asistido a misa y de gritar "¡Viva España!". Lo que sucedió inmediatamente fue una derrota que nadie trató de evitar. De hecho, cuando el Cristóbal Colón fue hundido por sus tripulantes para que no fuese apresado por el enemigo, apenas había sufrido daños. (Ricardo Peytaví)
Es una ciudad de calles estrechas y casas bajas, aplastada por un calor canicular casi todos los días del año. Da la sensación como en muchos otros lugares del país, de que el reloj se paró en enero de 1959, o quizá mucho antes; si no fuese por el tráfico rodado, la expansión de los barrios periféricos y otros pocos símbolos adicionales de una modernidad raquítica, se diría que Santiago de Cuba conserva el aspecto que tendría aquel domingo 3 de julio de 1898, hace hoy exactamente cien años, el día en que lo poco que quedaba de la Armada española se disponía a un sacrificio inevitable frente a la escuadra norteamericana.
Salida a plena luz del día:
Eran las nueve y media de la mañana cuando el crucero acorazado Infanta María Teresa, buque insignia del almirante Pascual Cervera, abandonaba la bahía de Santiago de Cuba. La batalla comenzó inmediatamente: a las 9,35 el "Teresa" abrió fuego sobre un acorazado norteamericano, aunque su intención era dirigirse a toda máquina hacia el Brooklyn, al que interesaba poner fuera de combate enseguida por ser el navío más rápido de la escuadra enemiga. Detrás del "Teresa" salieron en fila india (no había otra posibilidad por las características de la bahía) los también cruceros acorazados Vizcaya, Cristóbal Colón y Almirante Oquendo, con la intención de huir rápidamente hacia el oeste. Por último se hicieron a la mar los destructores Furor y Plutón, que no tenían ninguna opción ante la potencia de fuego de Estados Unidos.
El único barco que podía, en principio, ponerse a salvo era el Cristóbal Colón, al ser el más rápido de ambas flotas. Estuvo a punto de conseguirlo, pero al consumir todo el carbón de calidad, tuvo que emplear otro de menor poder calorífico; perdió velocidad y fue alcanzado por los acorazados enemigos. Su comandante decidió embarrancarlo a las 13,54 en las proximidades de la desembocadura del río Turquino, a 48 millas (89 kilómetros) de Santiago. La suerte de los otros cruceros fue similar. El "Teresa", aunque en principio hizo huir al Brooklyn, sucumbió bajo el fuego del Indiana y el Oregon. El "Oquendo" y los dos destructores sufrieron un intenso castigo desde que abandonaron la bahía y quedaron fuera de combate en poco tiempo. El Vizcaya, alcanzado por varias andanadas, decidió encallar en el Aserradero, donde le explotaron las calderas y los pañoles de munición poco después de las once de la mañana. En algo más de cuatro horas, la escuadra española del Atlántico quedó aniquilada.
Aunque la cifra de bajas nunca se han considerado muy exactas, en el bando español hubo 332 muertos y 197 heridos; en el norteamericano un muerto y unos pocos heridos. Los daños que sufrieron los navíos de EE.UU. fueron escasos. Jamás se había visto algo parecido en la historia naval. Muchas toneladas de papel se han impreso en los últimos cien años para tratar de explicar lo sucedido aquel día. En la parte española siempre ha prevalecido la idea de que la escuadra del almirante Cervera se enfrentaba a una fuerza infinitamente superior, y que sus barcos eran viejos y estaban mal equipados, pero eso no es del todo cierto. El "Teresa", el Vizcaya y el "Oquendo" habían entrado en servicio en 1893, sólo cinco años antes, mientras que el "Colón", el Furor y el Plutón fueron botados el año anterior. Los barcos españoles tenían una coraza y armamento más ligeros que los norteamericanos, pero también eran más rápidos. Se trataba en ambos casos de flotas modernas aunque construidas con una concepción distinta. España necesitaba buques capaces de trasladarse con rapidez a sus posesiones de ultramar, no sólo en el Caribe, sino también al otro lado del mundo, en Filipinas. Estados Unidos, al carecer de un imperio ultramarino, optó por barcos más pesados pero también menos ágiles. En principio, ninguna de las dos armadas tenía ventaja sobre la otra. Todo dependía del tipo de combate naval que se entablase, pero tanto en Cavite (Filipinas) como en Santiago de Cuba, las circunstancias le dieron una ventaja aplastante a los navíos yanquis.
El justificado pesimismo de Cervera:
A estas alturas, los historiadores tienen pocas dudas de ue el pesimismo secular de Pascual Cervera fue decisivo no ya para la derrota en sí (algo difícil de evitar), sino para la forma tan rápida con que ésta se produjo. Cervera fue a Cuba a regañadientes. El 20 de abril de 1898, cuando la flota española se reunió en las islas de Cabo Verde, le recomendó al ministro de Marina que en vez de zarpar rumbo al Caribe, resultaba más aconsejable trasladar la escuadra a Canarias, para defender este archipiélago (e incluso costas peninsulares) de un posible ataque norteamericano. Sin embargo, el 24 de abril el Gobierno le ordenó que saliese hacia las Antillas. En el mismo mensaje se le informó que la bandera de estados Unidos era enemiga. Cervera preparó los barcos y zarpó el 29 de abril. Antes, le escribió una carta a su hermano en la que, entre otras cosas, le decía :
"Vamos a un sacrificio tan estéril como inútil; y si en él muero, como parece seguro, cuida de mi mujer y de mis hijos.
El pesimismo de Cervera contrasta con la euforia que se vivía en España- la población, enardecida por una prensa patriotera, estaba convencida de que la escuadra española no sólo derrotaría a la norteamericana, sino que incluso bombardearía y bloquearía algunos puertos de ese país. El 19 de mayo la escuadra norteamericana arribó al puerto de Santiago de Cuba. Era un lugar seguro, donde al enemigo le resultaba casi imposible entrar, pero del que resultaría muy difícil salir si la escuadra norteamericana establecía un bloqueo, como así fue. El 25 de mayo, Cervera envió un telegrama al ministro de Marina en estos términos:
"Estamos bloqueados. Califiqué de desastrosa la venida para los intereses de la Patria. Los hechos empiezan a darme la razón. Con la desproporción de fuerzas, es imposible ninguna acción eficaz. Tenemos víveres para un mes".
Lo que ocurrió entre esa fecha y el 3 de julio ha dado pie a debates apasionados a lo largo de un siglo. La pregunta es por qué salió Cervera si las posibilidades de escapar eran mínimas, y la respuesta siempre es la misma: porque se lo ordenaron. La propia defensa de la ciudad ya resultaba delicada. Parte de la dotación de los barcos fue desembarcada para apoyar a la infantería y luego reembarcada justo antes de que la escuadra se hiciera a la mar. Se corría el riesgo de que las tropas yanquis, apoyadas por los mambises, se apoderasen de la entrada de la bahía y encerrasen a la escuadra. Otros historiadores, como el cubano Enrique Pérez-Cisneros, hablan de que el Gobierno de Madrid temía que Cervera se rindiera sin combatir. En la metrópoli se prefería una derrota honrosa en el mar. Sea como fuese, resulta incomprensible que los barcos españoles zarpasen a primera hora de una larga jornada de verano, en vez de aprovechar la oscuridad de la noche o incluso un día de mal tiempo que dificultase el bloqueo. Lejos de eso, se enfrentaron a una poderosa escuadra en el peor momento, eso sí, después de haber asistido a misa y de gritar "¡Viva España!". Lo que sucedió inmediatamente fue una derrota que nadie trató de evitar. De hecho, cuando el Cristóbal Colón fue hundido por sus tripulantes para que no fuese apresado por el enemigo, apenas había sufrido daños. (Ricardo Peytaví)
El hundimiento del maine
En 1898 Estados unidos todavía no era una potencia mundial, aunque ejercía un liderazgo claro en América. La experiencia de la Guerra de Cuba terminará de catapultar a la joven nación entre las grandes potencias. Pero, ¿qué sucedió realmente en La Habana el 15 de febrero de 1898? ¿Utilizó Norteamérica la supuesta agresión para legitimar su intervención en Cuba?
La política internacional de los Estados Unidos tras su Guerra Civil se centró en consolidar su posición en la región. La próspera economía norteamericana se afianzaba poco a poco y necesitaba nuevos mercados que conquistar y materias primas baratas para sus manufacturas. México, Costa Rica y Honduras fueron los primeros países en recibir una fuerte inversión norteamericana. Mientras que en México se fortalecían las empresas mineras, petroleras, ganaderas y de infraestructuras, la poderosa United Fruit Company tendía sus tentáculos por todo Centroamérica; en Cuba la producción de azúcar pasó a manos de empresas yanquis. La doctrina Maham dotaba de una nueva visión geopolítica a la actuación exterior de los Estados Unidos.
En 1897 se pudo observar el primer cambio en la política de hegemonía que desde Washington quería imponerse a todo el continente. La mediación de los Estados Unidos en la crisis entre Venezuela y los Gran Bretaña por la cuestión de límites fronterizos en La Guayana, consolidó su fuerza en la región. El conflicto se solucionó y el éxito animo a los Estados Unidos a participar más activamente en los asuntos de la región.
La política exterior norteamericana en América se completó con el intento de manipulación del Panamericanismo, que en las últimas décadas había vuelto a resurgir entre ciertas clases sociales de diferentes países. Desde 1826 se habían celebrado varios congresos, pero fue en el 1888, cuando el Congreso de los Estados Unidos propuso que la próxima reunión se celebrara en Washington. Fueron muchas las voces que se levantaron en contra de este intento de manipulación norteamericano, pero al final se celebró 1889 en la capital norteamericana.
Mientras tanto, Estados Unidos seguía extendiendo sus intereses económicos por Chile y Argentina, convirtiéndose en poco tiempo en uno de los mayores inversores extranjeros en estos y otros países Sudamericanos.
Cuba sufría una larga guerra civil que comenzaba a afectar los intereses de los Estados Unidos, animados más que nunca a comprar la isla a los españoles. No era la primera vez que los ojos de los norteamericanos se posaban sobre las islas de Cuba y Puerto Rico. Desde la formación de Estados Unidos muchas habían sido las voces que pedían la anexión de las islas, ya fuera por la fuerza o negociando su compra. En 1762, La Habana fue ocupada por una fuerza conjunta de norteamericanos, todavía súbditos de su majestad, y fuerzas de Gran Bretaña. La capital volvió a recuperarse tras el Tratado de París. De los numerosos intentos de compra e invasión de la isla hay que destacar los protagonizados por el venezolano Narciso López, creador de la bandera cubana y cara visible de los intereses del famoso Club de La Habana. Los intentos de compra fueron numerosos, el último se produjo pocas semanas antes de que comenzara la guerra entre España y los Estados Unidos.
¿Por qué los Estados Unidos no intervenían en Cuba como lo habían hecho en otros países?
La intervención armada en Cuba no estaba exenta de dificultades. A pesar de que la opinión pública, animada por los amarillistas periódicos de Hearst y Pulitzer, estaba a favor de una acción armada, el presidente norteamericano McKinley sabía que los países europeos no verían con buenos ojos el ataque frontal a una potencia debilitada como era España. A pesar de todo, McKinley decidió enviar un buque de guerra a La Habana, el Maine, para presionar al gobierno de Sagasta y conseguir así la compra de la isla, terminando con una gran sangría económica y humana para su país. Al mismo tiempo, el general Woodford negociaba en Madrid con una reina cansada, que estaba apunto de ceder la soberanía de las islas y terminar con la crisis política de los últimos años.
¿Qué podía decidir a España a vender Cuba y Filipinas? ¿Cómo podía conseguir el gobierno de McKinley que una intervención de los Estados Unidos no pareciera una agresión directa?
Mandar un buque de guerra a un puerto hostil era la forma más fácil de que un accidente o algún tipo de disturbios terminaran por provocar una crisis diplomática. El embajador norteamericano Lee lo sabía y no dudo en pedir a la Secretaría de Marina que enviara un buque para defender los intereses norteamericanos. Pero los días pasaron y los españoles se guardaron de crear cualquier conflicto diplomático. Tan sólo dos días antes de que el Maine abandonara La Habana, en la noche del 15 de febrero, el buque estallaba misteriosamente.
Las decenas de teorías que han intentado explicar uno de los misterios bélicos sin resolver más antiguos de la historia contemporánea, sólo han conseguido contribuir más a la confusión.
La política exterior norteamericana desde 1898 ha repetido el modelo de “nación agredida” en los momentos claves de su historia. El caso del ataque a Peart Harbourt por los japoneses en la segunda Guerra Mundial, que sacó a los Estados Unidos de su política de neutralidad o el más significativo del golfo de Tonkín de 1964, por el que el Congreso de los Estados Unidos aprobaba la intervención en Vietnam, nos muestran dos ejemplos del modelo de “nación agredida” que se ve avocada a la guerra, pero no son los únicos. El caso de los barcos Lusitania y el Sussex, donde numerosos ciudadanos norteamericanos perdieron la vida, llevó al presidente Wilson a plantear un ultimátum a Alemania. En 1917, el hundimiento de un mercante estadounidense con toda su tripulación provocó la declaración de guerra. En los últimos años Estados Unidos ha utilizado un nuevo sistema de guerra defensiva denominado “guerra preventiva”, por la que Washington puede propiciar un conflicto para evitar una amenaza contra su país o países amigos.
¿Esto quiere decir que los Estados Unidos hundieron su propio buque de guerra asesinando a decenas de marineros, para provocar la guerra con España?
Los norteamericanos, con toda probabilidad, no hundieron el Maine, o por lo menos, si tuvieron algo que ver en su hundimiento, nunca pensaron que el número de victimas iba a ser tan elevado. Un accidente o un sabotaje fueron las causas probables del desgraciado incidente. Philp Alger, el principal experto de artillería de la Marina, realizó unas declaraciones en el Washington Evening Start en las que afirmaba que las explosiones de los pañoles, por el contrario, producen efectos muy similares a los causados por la explosión a bordo del Maine...La causa más común (de dichas explosiones) es un incendio en las carboneras.
La utilización del Maine como una excusa para la intervención armada en Cuba, Puerto Rico, Filipinas y otras islas del Pacífico, inscribía a los Estados Unidos en una nueva forma de hacer política exterior. La utilización de la agresión como legitimación de sus deseos intervensionistas.
La política internacional de los Estados Unidos tras su Guerra Civil se centró en consolidar su posición en la región. La próspera economía norteamericana se afianzaba poco a poco y necesitaba nuevos mercados que conquistar y materias primas baratas para sus manufacturas. México, Costa Rica y Honduras fueron los primeros países en recibir una fuerte inversión norteamericana. Mientras que en México se fortalecían las empresas mineras, petroleras, ganaderas y de infraestructuras, la poderosa United Fruit Company tendía sus tentáculos por todo Centroamérica; en Cuba la producción de azúcar pasó a manos de empresas yanquis. La doctrina Maham dotaba de una nueva visión geopolítica a la actuación exterior de los Estados Unidos.
En 1897 se pudo observar el primer cambio en la política de hegemonía que desde Washington quería imponerse a todo el continente. La mediación de los Estados Unidos en la crisis entre Venezuela y los Gran Bretaña por la cuestión de límites fronterizos en La Guayana, consolidó su fuerza en la región. El conflicto se solucionó y el éxito animo a los Estados Unidos a participar más activamente en los asuntos de la región.
La política exterior norteamericana en América se completó con el intento de manipulación del Panamericanismo, que en las últimas décadas había vuelto a resurgir entre ciertas clases sociales de diferentes países. Desde 1826 se habían celebrado varios congresos, pero fue en el 1888, cuando el Congreso de los Estados Unidos propuso que la próxima reunión se celebrara en Washington. Fueron muchas las voces que se levantaron en contra de este intento de manipulación norteamericano, pero al final se celebró 1889 en la capital norteamericana.
Mientras tanto, Estados Unidos seguía extendiendo sus intereses económicos por Chile y Argentina, convirtiéndose en poco tiempo en uno de los mayores inversores extranjeros en estos y otros países Sudamericanos.
Cuba sufría una larga guerra civil que comenzaba a afectar los intereses de los Estados Unidos, animados más que nunca a comprar la isla a los españoles. No era la primera vez que los ojos de los norteamericanos se posaban sobre las islas de Cuba y Puerto Rico. Desde la formación de Estados Unidos muchas habían sido las voces que pedían la anexión de las islas, ya fuera por la fuerza o negociando su compra. En 1762, La Habana fue ocupada por una fuerza conjunta de norteamericanos, todavía súbditos de su majestad, y fuerzas de Gran Bretaña. La capital volvió a recuperarse tras el Tratado de París. De los numerosos intentos de compra e invasión de la isla hay que destacar los protagonizados por el venezolano Narciso López, creador de la bandera cubana y cara visible de los intereses del famoso Club de La Habana. Los intentos de compra fueron numerosos, el último se produjo pocas semanas antes de que comenzara la guerra entre España y los Estados Unidos.
¿Por qué los Estados Unidos no intervenían en Cuba como lo habían hecho en otros países?
La intervención armada en Cuba no estaba exenta de dificultades. A pesar de que la opinión pública, animada por los amarillistas periódicos de Hearst y Pulitzer, estaba a favor de una acción armada, el presidente norteamericano McKinley sabía que los países europeos no verían con buenos ojos el ataque frontal a una potencia debilitada como era España. A pesar de todo, McKinley decidió enviar un buque de guerra a La Habana, el Maine, para presionar al gobierno de Sagasta y conseguir así la compra de la isla, terminando con una gran sangría económica y humana para su país. Al mismo tiempo, el general Woodford negociaba en Madrid con una reina cansada, que estaba apunto de ceder la soberanía de las islas y terminar con la crisis política de los últimos años.
¿Qué podía decidir a España a vender Cuba y Filipinas? ¿Cómo podía conseguir el gobierno de McKinley que una intervención de los Estados Unidos no pareciera una agresión directa?
Mandar un buque de guerra a un puerto hostil era la forma más fácil de que un accidente o algún tipo de disturbios terminaran por provocar una crisis diplomática. El embajador norteamericano Lee lo sabía y no dudo en pedir a la Secretaría de Marina que enviara un buque para defender los intereses norteamericanos. Pero los días pasaron y los españoles se guardaron de crear cualquier conflicto diplomático. Tan sólo dos días antes de que el Maine abandonara La Habana, en la noche del 15 de febrero, el buque estallaba misteriosamente.
Las decenas de teorías que han intentado explicar uno de los misterios bélicos sin resolver más antiguos de la historia contemporánea, sólo han conseguido contribuir más a la confusión.
La política exterior norteamericana desde 1898 ha repetido el modelo de “nación agredida” en los momentos claves de su historia. El caso del ataque a Peart Harbourt por los japoneses en la segunda Guerra Mundial, que sacó a los Estados Unidos de su política de neutralidad o el más significativo del golfo de Tonkín de 1964, por el que el Congreso de los Estados Unidos aprobaba la intervención en Vietnam, nos muestran dos ejemplos del modelo de “nación agredida” que se ve avocada a la guerra, pero no son los únicos. El caso de los barcos Lusitania y el Sussex, donde numerosos ciudadanos norteamericanos perdieron la vida, llevó al presidente Wilson a plantear un ultimátum a Alemania. En 1917, el hundimiento de un mercante estadounidense con toda su tripulación provocó la declaración de guerra. En los últimos años Estados Unidos ha utilizado un nuevo sistema de guerra defensiva denominado “guerra preventiva”, por la que Washington puede propiciar un conflicto para evitar una amenaza contra su país o países amigos.
¿Esto quiere decir que los Estados Unidos hundieron su propio buque de guerra asesinando a decenas de marineros, para provocar la guerra con España?
Los norteamericanos, con toda probabilidad, no hundieron el Maine, o por lo menos, si tuvieron algo que ver en su hundimiento, nunca pensaron que el número de victimas iba a ser tan elevado. Un accidente o un sabotaje fueron las causas probables del desgraciado incidente. Philp Alger, el principal experto de artillería de la Marina, realizó unas declaraciones en el Washington Evening Start en las que afirmaba que las explosiones de los pañoles, por el contrario, producen efectos muy similares a los causados por la explosión a bordo del Maine...La causa más común (de dichas explosiones) es un incendio en las carboneras.
La utilización del Maine como una excusa para la intervención armada en Cuba, Puerto Rico, Filipinas y otras islas del Pacífico, inscribía a los Estados Unidos en una nueva forma de hacer política exterior. La utilización de la agresión como legitimación de sus deseos intervensionistas.
La primera revolución española
La revolución española es el mayor acontecimiento contemporáneo desde el período revolucionario de 1917-18. Su significación, no solo para el porvenir de España, sino para el movimiento obrero internacional, es grandiosa. Tres años después de la derrota sin lucha de la clase trabajadora más poderosa de Europa, la clase obrera alemana, la revolución española muestra nuevamente de qué capacidades, energía creadora y heroismo sin límites dispone el proletariado.
No olvidemos que durante el más amargo de los años de la catástrofe alemana, en 1933, hubo no pocos que llegaron a dudar del socialismo y hasta de la misión histórica del proletariado (Souvarine). La antítesis Alemania 1933-España 1936, es tan neta y visible que, muchos que están acostumbrados a medir los acontecimientos con medidas abstractas y no con medidas históricas, se ven arrastrados a conclusiones falsas y peligrosas. Consideran el movimiento obrero alemán en su totalidad; al mismo tiempo hacen un flaco servicio a la revolución española, dado que la idealizan en lugar de sacar experiencias de ella. Los verdaderos revolucionarios no son poetas líricos, sino elementos críticos y progresivos en la revolución proletaria.
No se puede comparar una revolución en ascenso, como la de julio de España, con el último período de una revolución decadente y vencida, es decir, no se la puede comparar con los acontecimientos del año 1933 en Alemania. No se pueden considerar aisladamente los acontecimientos de 1933 y enfrentarlos con la revolución española de julio, sino que es necesario considerar las dos revoluciones en su conjunto y compararlas; es necesario limitarse a comparar la iniciación de la revolución socialista en ambos países y sacar de este hecho determinadas consecuencias sobre el carácter de ambas revoluciones. Pero en este caso se puede hacer entrar en la comparación la revolución de 1918, en noviembre, es decir, en un período durante el cual, en Alemania, el proletariado derribaba los viejos poderes, pero no tomaba el poder del Estado, y de este modo hizo posible la primera consolidación de la sociedad burguesa.
La decadencia política del «Komintern» nos obliga a aclarar una cuestión que en la teoría y en la práctica se halla resuelta desde hace tiempo: la cuestión del carácter de la revolución de julio de 1936 y de las revoluciones de noviembre en Alemania. Es notorio que el stalinismo considera la revolución de julio como una revolución democrática, cuyo objetivo no puede ser otro que una república democrático-burguesa. Según la interpretación stalinista de la historia, la insurrección de julio de 1936 se relaciona directamente con la revolución democrática burguesa de abril de 1931; julio debe continuar «la herencia de 1931, estabilizar definitivamente la republica morada».
Ciertamente que la revolución de Julio de 1936 y la revolución de Abril de 1931 tienen finalidades comunes; ante ambas se encuentran los problemas sin resolver de la revolución democrático-burguesa; en primer lugar, la cuestión de las nacionalidades, la cuestión agraria y la cuestión religiosa.
En ambas revoluciones, las masas proletaas son la fuerza motriz de la revolución. Pero al lado de estas diferencias comunes, nos sale al encuentro una diferencia fundamental: en la revolución de Abril de 1931, la
dirección de la revolución cae en el regazo de la burguesía liberal, pues la inmensa mayoría de las masas revolucionarias cree todavia-parte de la clase obrera, del campesinado, de la pequeña burguesía y de las minorías nacionales oprimidas- que la buruesía liberal puede y quiere solventar las cuestiones de la revolución democrática. Y esta confianza política de las masas en el papel director de la burguesía, puso límites infranqueables al paso inmediato de la evolución de Abril hacia una revolución socialista. Contra esto, los stalinistas, con su insensata consigna de entonces «¡abajo la república, viva la dictadura proletaria!», debían estrellarse y se estrellaron.
Fueron necesarias las luchas de clase más encarnizadas durante media década, los compromisos más vergonzosos de la burguesía, la insurrección aislada y heroica del proleariado astur, y por último el derrumbamiento de las breves ilusiones del Frente Popular entre febrero y julio de 1936, para
que el proletariado español llegase a comprender, a la vista de la contrarrevolución amenazante, que «la república no puede vivir como república burguesa democrática, sino solamente como república socialista».
Las consignas democráticas de la revolución no pueden ser resueltas por la burguesía; solamente pueden encontrar solución bajo la dirección del proletariado.
Lo que para nosotros, marxistas revolucionarios, desde la primera insurrección independiente del proletariado en la historia, la insurrección de Junio de 1848 en París, estaba claro, lo que Marx escribía a los obreros alemanes en 1850, penetró en los años 1931-36 profundamente en la conciencia del proletariado español. Marx preconizaba, aconsejando a los obreros alemanes, la lucha independiente en la revolución, la creación de órganos de clase independientes frente a la burguesía liberal victoriosa, la continuación de la revolución, la «revolución permanente». El proletariado español reconoció la necesidad de asumir por si sólo la dirección de la revolución y de realizar al mismo tiempo la solución de las consignas democráticas de la revolución y la transformación socialista de la sociedad.
El mayor mérito histórico de los anarquistas en España consiste en que han tomado parte, de un modo activo, en esta revolución de la conciencia proletaria, y de que a pesar de sus falsas concepciones teóricas, han entrado en la revolución de Julio como una fuerza revolucionaria.
Por el contrario, a los stalinistas les estuvo reservado el interpretar la revolución democrática de 1931 como una revolución socialista y la revolución socialista de 1936 como una revolución democrático-burguesa.
Si en 1931 cayeron en el aventurerismo revolucionario, en 1936 han convertido su posición de defensa de la república democrática en una fuerza reaccionaria en período de revolución socialista.
No olvidemos que durante el más amargo de los años de la catástrofe alemana, en 1933, hubo no pocos que llegaron a dudar del socialismo y hasta de la misión histórica del proletariado (Souvarine). La antítesis Alemania 1933-España 1936, es tan neta y visible que, muchos que están acostumbrados a medir los acontecimientos con medidas abstractas y no con medidas históricas, se ven arrastrados a conclusiones falsas y peligrosas. Consideran el movimiento obrero alemán en su totalidad; al mismo tiempo hacen un flaco servicio a la revolución española, dado que la idealizan en lugar de sacar experiencias de ella. Los verdaderos revolucionarios no son poetas líricos, sino elementos críticos y progresivos en la revolución proletaria.
No se puede comparar una revolución en ascenso, como la de julio de España, con el último período de una revolución decadente y vencida, es decir, no se la puede comparar con los acontecimientos del año 1933 en Alemania. No se pueden considerar aisladamente los acontecimientos de 1933 y enfrentarlos con la revolución española de julio, sino que es necesario considerar las dos revoluciones en su conjunto y compararlas; es necesario limitarse a comparar la iniciación de la revolución socialista en ambos países y sacar de este hecho determinadas consecuencias sobre el carácter de ambas revoluciones. Pero en este caso se puede hacer entrar en la comparación la revolución de 1918, en noviembre, es decir, en un período durante el cual, en Alemania, el proletariado derribaba los viejos poderes, pero no tomaba el poder del Estado, y de este modo hizo posible la primera consolidación de la sociedad burguesa.
La decadencia política del «Komintern» nos obliga a aclarar una cuestión que en la teoría y en la práctica se halla resuelta desde hace tiempo: la cuestión del carácter de la revolución de julio de 1936 y de las revoluciones de noviembre en Alemania. Es notorio que el stalinismo considera la revolución de julio como una revolución democrática, cuyo objetivo no puede ser otro que una república democrático-burguesa. Según la interpretación stalinista de la historia, la insurrección de julio de 1936 se relaciona directamente con la revolución democrática burguesa de abril de 1931; julio debe continuar «la herencia de 1931, estabilizar definitivamente la republica morada».
Ciertamente que la revolución de Julio de 1936 y la revolución de Abril de 1931 tienen finalidades comunes; ante ambas se encuentran los problemas sin resolver de la revolución democrático-burguesa; en primer lugar, la cuestión de las nacionalidades, la cuestión agraria y la cuestión religiosa.
En ambas revoluciones, las masas proletaas son la fuerza motriz de la revolución. Pero al lado de estas diferencias comunes, nos sale al encuentro una diferencia fundamental: en la revolución de Abril de 1931, la
dirección de la revolución cae en el regazo de la burguesía liberal, pues la inmensa mayoría de las masas revolucionarias cree todavia-parte de la clase obrera, del campesinado, de la pequeña burguesía y de las minorías nacionales oprimidas- que la buruesía liberal puede y quiere solventar las cuestiones de la revolución democrática. Y esta confianza política de las masas en el papel director de la burguesía, puso límites infranqueables al paso inmediato de la evolución de Abril hacia una revolución socialista. Contra esto, los stalinistas, con su insensata consigna de entonces «¡abajo la república, viva la dictadura proletaria!», debían estrellarse y se estrellaron.
Fueron necesarias las luchas de clase más encarnizadas durante media década, los compromisos más vergonzosos de la burguesía, la insurrección aislada y heroica del proleariado astur, y por último el derrumbamiento de las breves ilusiones del Frente Popular entre febrero y julio de 1936, para
que el proletariado español llegase a comprender, a la vista de la contrarrevolución amenazante, que «la república no puede vivir como república burguesa democrática, sino solamente como república socialista».
Las consignas democráticas de la revolución no pueden ser resueltas por la burguesía; solamente pueden encontrar solución bajo la dirección del proletariado.
Lo que para nosotros, marxistas revolucionarios, desde la primera insurrección independiente del proletariado en la historia, la insurrección de Junio de 1848 en París, estaba claro, lo que Marx escribía a los obreros alemanes en 1850, penetró en los años 1931-36 profundamente en la conciencia del proletariado español. Marx preconizaba, aconsejando a los obreros alemanes, la lucha independiente en la revolución, la creación de órganos de clase independientes frente a la burguesía liberal victoriosa, la continuación de la revolución, la «revolución permanente». El proletariado español reconoció la necesidad de asumir por si sólo la dirección de la revolución y de realizar al mismo tiempo la solución de las consignas democráticas de la revolución y la transformación socialista de la sociedad.
El mayor mérito histórico de los anarquistas en España consiste en que han tomado parte, de un modo activo, en esta revolución de la conciencia proletaria, y de que a pesar de sus falsas concepciones teóricas, han entrado en la revolución de Julio como una fuerza revolucionaria.
Por el contrario, a los stalinistas les estuvo reservado el interpretar la revolución democrática de 1931 como una revolución socialista y la revolución socialista de 1936 como una revolución democrático-burguesa.
Si en 1931 cayeron en el aventurerismo revolucionario, en 1936 han convertido su posición de defensa de la república democrática en una fuerza reaccionaria en período de revolución socialista.
martes, 11 de enero de 2011
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